El Consejo Regional de Asturias abordará el problema del paro

El pleno del Consejo Regional de Asturias ha diecidido, con los votos del PSOE y UCD, dar un quiebro al plan de solidaridad regional contra el paro, presentado por el Partido Comunista de Asturias, con el acuerdo de reconducir este tema a la Comisión de Asuntos Económicos del ente preautonómico. La propuesta comunista de visitar al presidente Suárez para impedir el posible cierre parcial de Hunosa fue rechazada por los consejeros socialistas y centristas.El deseo del Presidente, Rafael Fernández, del PSOE, de no acentuar el enfrentamiento con el PCA, cuyo portavoz se encontraba eufórico tras el éxito de la manifestación convocada el sábado en Oviedo por CC OO contra el paro y en defensa del Estatuto de Autonomía, impidió una votación específica sobre el plan comunista de solidaridad regional, que había sido derrotado al contar con la oposición del PSOE, UCD y Coalición Democrática.

La argucia de trasladar la temática del paro a una comisión del propio organismo preautonómico, deja las puertas abiertas al PCA para presentar de nuevo su programa en cualquier momento.

Al respecto, existe una profunda división de criterios entre el PSOE y el PCA. Los socialistas asturianos califican los planes de urgencia de «episodio lamentable e insolidario», en la medida en que son el preludio de la lucha interterritorial de todos contra todos, en la que cada región concentrará sus esfuerzos políticos en defensa de sus propios intereses, sin preocuparse de si el coste de sus proyectos acumulados a los de otras regiones superará o no la capacidad de inversión de los servicios del Estado.

Por su parte, el PCA elaboró un «programa de solidaridad contra el paro», que hace referencia a tres frentes de actuación: propuestas para dar empleo, para frenar el crecimiento del paro y para redistribuir el empleo existente. La financiación de un plan de construcción de viviendas correspondería a un consorcio financiero regional, integrado por la banca privada que actúa en Asturias, la caja de ahorros y la participación de crédito a la construcción y el Banco Hipotecario.

Al Consejo Regional le correspondería la dirección y control del programa, además de promover la creación de una promotora regional no lucrativa y del consorcio financiero. El Consejo negociaría con la Administración central la realización de diversas obras de carreteras y ferrocarriles, apoyaría las reivindicaciones de los campesinos asturianos y promovería una carta reguladora de las subcontratas dependientes de la empresa pública radicada en Asturias.

El portavoz comunista, Gerardo Iglesias, dramatizó el pleno del ente preautonómico a partir del reciente anuncio de cierre del pozo Barredo, de Hunosa. En su opinión, la reestructuración de Hunosa y Ensidesa puede suponer la pérdida de 14.000 puestos de trabajo. El PCA es partidario de una reestructuración urgente de estas dos empresas públicas, que debe ser debatida en el Parlamento, en el Consejo Regional. de Asturias y negociada con los trabajadores.

Hunosa produce el 40 de la huida española, y Ensidesa, el 45% del acero. Para redistribuir el empleo, los comunistas proponen reducir en los dos próximos años un 25,76 de las horas extraordinarias, para crear 7.000 puestos de trabajo; disminuir el pluriempleo, para generar 4.000 empleos en 1981 y 1982, y anticipar la jubilación a los 64 años.

El PCA sostiene que el Consejo Regional de Asturias, como máxima institución política y órgano de autogobierno, es el encargado de llevar la iniciativa, la dirección y el control del conjunto de las medidas que se deben tomar en esta región para hacer frente al paro, que en Asturias viene experimentando últimamente un ritmo de crecimiento de los más elevados. La Delegación de Trabajo estimaba el paro, en junio de este año, en 41.750 personas, es decir, casi el 10% de la población activa.