Victoria de los Angeles, la "Malibrán" de nuestra época

Convocado por la Asociación Cultural Padre Soler, se celebrará el próximo miércoles, en el teatro Real, un concierto extraordinario en homanaje a Victoria de los Angeles. La gran voz de la soprano catalana, el rigor ejemplar de su arte, estará acompañado por el de otros dos grandes españoles: el guitarrista Segovia y el pianista Luis Galve, a los que se sume el mensaje joven de la Orquesta de Cámara Española, que dirige Víctor Martín.

Tras el Quinteto, de Antonio Soler, sonarán en la guitarra legendaria de Segovia, Scarlatti, Haydii y Villalobos, y en el piano, cargado de magisterio, de Luis Galve, dos medidas de Enrique Granados: la romántica del Allegro y la popular de las Danzas.Después la voz de Victoria (apoyada en el piano de Zanetti) renovará el curso, tantas veces seguido, que va desde los clásicos italianos y alemanes a Rodrigo, Toldrá y Mompou, pasando por los románticos alemanes y el gran trío francés: Fauré, Debussy y Ravel.

Victoria de los Angeles, en sus 35 años crecidos de carrera, ha aportado al lied, a la canción española, a la melodie, o la ópera mozartiana, italiana, inglesa, alemana o española, unos acentos de nobleza que ha creado escuela, con la fuerza que posee siempre el gran ejemplo, la meta que se considera inalcanzable, pero hacia la que, irremisiblemente, se camina. Desde María Malibrán no habíamos aportado a la historia del canto un mito tan real como el de Victoria. Cuando la escuchamos cantar, más que necesidad de aplaudir nos sentimos obligados al acto de adhesión. Pocos homenajes tan justos como el que ahora se anuncia.

Hace dos años, Victoria de los Angeles obtuvo el Premio Nacional de Música, concedido por primera vez por el Ministerio de Cultura, a través del cual se reconocía su amplia labor artística en el género lírico y su contribución a la difusión de la música española. Anteriormente, entre otros galardones, había conseguido por tres veces el Gran Premio de la Academia Francesa al mejor disco, la Medalla de Oro del Gran Teatro del Liceo y de la Ciudad de Barcelona y el Premio Internacional de Arte.

Una carrera que empezó en el Liceo de Barcelona

Victoria de los Angeles, que nació en Barcelona en 1924, se presentó a los veintiún años como cantante de ópera en el Liceo, de la Ciudad Condal, con Las bodas de Fígaro. En 1947 ganó el concurso internacional del Conservatorio de Ginebra, y al año siguiente cantó en el Liceo de Barcelona la ópera Tanhauser, de Wagner. A partir de entonces, sus éxitos en todo el mundo han sido ininterrumpidos. Nueva York acepta su debú en 1951 en el Carnegie Hall, y considera imprescindible en sus programas anuales la presencia de la gran lírica española. En 1952 canta Madame Butterfly en el Metropolitan Opera House, que constituye un éxito sin precedentes para una cantante española.El homenaje del próximo miércoles en el teatro Real madrileño no es sino un reconocimeinto a la soprano catalana, reconocida en todo el mundo como una de las mejores voces de nuestra época.