Manuel Fraga,

líder de Alianza Popular, sorprendió el pasado fin de semana a cuantos estaban esperándole en el hotel San Marcos, de León, militantes de su partido y periodistas, al entrar en el local con una almohada bajo el brazo. Tan insólito equipaje en un político con fama de duro provocó la curiosidad de algunos ciudadanos, que llamaron a los periódicos locales en demanda de información. Fraga explicó más tarde, en una conferencia de Prensa, informa Antonio Núñez, que él viaja siempre con su almohada debido a la dudosa comodidad de las que ofrecen los hoteles españoles, a las que -dijo- resulta difícil acostumbrarse cuando uno viaja mucho. El presidente aliancista aseguró también llevar una vida bastante «arrastrada», que le obliga a recuperar sueño en los viajes. «Ayer, entre Medina del Campo y Benavente, me eché una siesta que no la vendo por 20.000 duros. Y puedo asegurarles que dentro no llevo ninguna droga, ni blanda ni dura». Luego divagó sobre la necesidad de proteger adecuadamente las vértebras cervicales en previsión de accidentes automovilísticos.