Los niños de Arganda expresaron en una misa su dolor por los muertos de Ortuella

Unas 2.500 personas asistieron ayer a una misa celebrada en la iglesia parroquial de San Juan Bautista, en Arganda del Rey, en memoria de las víctimas del trágico suceso de Ortuella, en Vizcaya, y para manifestar públicamente su solidaridad humana con los familiares. La gran mayoría de los asistentes eran niños de todos los colegios de dicha localidad, y seis o siete de ellos subieron al altar de la iglesia para expresar desde allí su condolencia por sus compañeros muertos.La misa obedece a una iniciativa del Ayuntamiento de Arganda del Rey, y de su alcalde, el comunista Pedro Díez. Los asistentes al acto religioso abarrotaron totalmente el recinto. Los dos sacerdotes que concelebraron la misa expusieron su dolor por la muerte de las 51 personas, de ellas 48 niños de diversas edades, y exhortaron porque se tomen todas las medidas necesarias que eviten posibles repeticiones del accidente. Después de su alocución, subieron al altar un joven de unos dieciocho años, y a continuación, seis o siete niños de varios colegios del pueblo.