UCD y AP apoyan el programa de gobierno del Partido Nacionalista Vasco

Con el apoyo de UCD y AP, el Partido Nacionalista Vasco (PNV), minoría mayoritaria en el Parlamento vasco, en ausencia de Herri Batasuna, derrotó, a última hora de la noche del viernes, las resoluciones no vinculantes de la oposición, que recogían el total rechazo de aquélla al programa de gobierno que por espacio de tres días se ha debatido en la Cámara legislativa vasca. Un debate que los nacionalistas consideran «suficiente» y que la oposición -PSOE, Euskadiko Ezquerra y PCE- califica como «incompleto e insatisfactorio».

A última hora de la tarde se sus citó en la Cámara el tema de los conciertos económicos y el retraso en la aprobación de los mismos, que provocó largas y matizadas intervenciones. Juan Manuel Eguiagaray, en nombre del PSOE, culpó de ese retraso al PNV por su intransigencia en la negociación del aspecto referido a la autonomía normativa y pidió al Gobierno pragmatismo y flexibilidad en la negociación. «No les pido que renuncien a nada», afirmó, «pero pienso que por empecinarse en temas como este, cuya importancia en el concierto es bastante pequeña, se pierde un tiempo fundamental".Le contestó el propio Garaikoetxea, que señaló que el tema de la autonomía normativa no es una cuestión baladí. Luego añadió que si la negociación en el tema de los conciertos se paralizaba someterían el tema a la iniciativa legislativa del Parlamento.

Eguiagaray sugirió que el Gobierno tratará de llegar a la rápida aprobación de los conciertos y negociarse, si no se llegaba a, un acuerdo en el tema aludido, -la inclusión en el texto de una cláusula que podría decir: «... Sin que suponga renuncia a la autonomía normativa».

El portavoz nacionalista Emilio Guevara fue contundente: «La autonomía normativa es esencial. Nos jugamos en este tema el autogobierno y la autonomía financiera prevista en el Estatuto». Luego recordó que en este tema no se parte de cero, ya que Alava tiene por ejemplo hoy ya autonomía normativa en lo que se refiere a impuestos de sociedades.

La no presencia en el estrado de los consejeros de Sanidad, Agricultura e Interior, cuando eran requeridos por la oposición (Garaikoetxea señaló que las respuestas del Gobierno eran suficientes), provocó una agria batalla dialéctica, por cuestiones de orden, entre el portavoz del PSOE y el presidente del Parlamento vasco, como había sido la tónica en sesiones anteriores. La oposición se negó entonces a utilizar el segundo turno de intervenciones previstas y el Gobierno tampoco tomó la palabra.

Se pasó entonces a las resoluciones sobre el programa. Sólo tres se aprobaron. Una del PNV (que contó con el apoyo de UCD) referida a la necesidad de la urgente entrada en vigor de los conciertos económicos («instrumento específico vasco, foral y tradicional de financiación»), con alusiones al respeto del texto al artículo 41.2 del Estatuto (referido a la autonomía normativa) y al principio de solidaridad.

Se aprobó también con los votos del PNV y AP (se abstuvieron PC y PSOE y votó en contra EE) una resolución referida a la pacificación de Euskadi y más concretamente al compromiso del Gobierno a hacer un esfuerzo prioritario por erradicar el terrorismo.