Santana lloró por su victoria de ayer
Manuel Santana se fue ayer a los vestuarios con lágrimas en los ojos. Ganó en los octavos de final de los campeonatos de España a Juan Torralbo, por 7-6, 1-6 y 6-3. El último set lo jugó con el corazón. Sus fuerzas estaban al límite, frente a un contrario joven y en línea ascendente. La tensión que tuvo que soportar le hizo llorar nada más acabar el partido, y el público le tributó la ovación más clamorosa de todos los campeonatos.
El rival de Santana tuvo esta vez condiciones suficientes para ganarle. Torralbo hizo gala de un eficaz saque, dominio en las dejadas y más que aceptable voleas; estas condiciones técnicas, unidas a las físicas, le convirtieron en un serio contrario, ante el que Santana tuvo que sacrificar el juego preciosista por el del coraje.En el primer set, Santana ofreció espectáculo y deportividad. Le salió la dejada más perfecta de cuantas ha intentado en estos campeonatos -la bola, tras botar en campo contrario, volvió al suyo- y elevó el tenis al más alto grado de caballerosidad deportiva cuando cometió intencionadamente una doble falta tras concederle el juez-árbitro un tanto ilegal. Este rasgo, usual en él, lo realizó en una situación comprometida, cuando perdía 4-3 y con 40-15 en contra.
El segundo set pasó como una sombra. Torralbo practicó un eficaz juego y Santana sólo se apuntó el cuarto luego. Este falló en repetidas ocasiones y el público guardó un silencio sepulcral en respeto a un jugador, ya de 42 años, que se debatía en la pista con toda honradez, pero ante un rival, esta vez, de mejor juego.
Sin embargo, en el tercer set, ya con síntomas de cansancio muscular en el brazo, Santana emocionó a los espectadores, que una vez más llenaron las gradas de la Ciudad Deportiva del Real Madrid, jugando con el corazón. No pudo efectuar el servicio con potencia, pero en cada golpe puso el alma y todo su saber. Sus subidas a la red fueron ya sobre seguro y acumuló tantos casi con facilidad cuando parecía tener todo perdido.
Santana jugará hoy los cuartos de final, a las 4.30 de la tarde, contra Fernando Luna, jugador de veintidós años, que fue campeón mundial juvenil en 1977 y campeón de España. Este año, Luna ha sido titular del equipo español de Copa Davis y llegó a las semifinales del Gran Premio de Niza, donde perdió con Borg. El vencedor del partido se enfrentará en semifinales a Miguel Mir, que derrotó ayer a Antonio Muñoz. Angel Giménez también alcanzó ayer las semifinales, al derrotar a López Maeso, y jugará contra el ganador del Vizcaíno-Casals de hoy, que comenzará a las tres de la tarde.
En dobles, ayer se tenía que haber jugado la semifinal entre Santana-Mandarino y Muñoz-Giménez, pero el primero decidió abandonar. Este encuentro se tenía que haber disputado nada más acabar el individual de Santana.
En cualquier caso, los actuales campeonatos han alcanzado brillantez y emoción por la presencia de Santana. La ovación clamorosa que le tributó el público al finalizar su encuentro frente a Torralbo resultó elocuente.
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