Azcárate: Ingresar en la OTAN es ir a contracorriente de la historia"
Manuel Azcárate, especialista en cuestiones internacionales del Partido Comunista de España (PCE), criticó ayer en Santander la actual política exterior española y «las contradictorias actuaciones» del ministro Marcelino Oreja. «Durante veinticinco años», dijo, «ningún país ha entrado ni en la Organización del Tratado del Atlantico Norte (OTAN) ni en el Pacto de Varsovia. ¿Qué interés puede tener España en romper ese equilibrio y en acentuar con ello las tensiones entre los bloques? Tenemos un lugar propio. ¿Por qué renunciar a él? Si ingresamos en la OTAN se nos crearán obstáculos considerables para una política española de cara al Mediterráneo, el mundo árabe y América Latina. No seríamos uno más de los países de la OTAN, seríamos el país que ha ingresado a contracorriente de la historia, en plena crisis del sistema bipolar».Manuel Azcárate, que habló sobre Comunidad europea y comunidad mediterránea en el curso «Defensa, seguridad y distensión en el Mediterráneo», que se está celebrando en la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo, afirmó que, desde la aparición y la difusión de las armas nucleares, el Mediterráneo ha dejado de ser el teatro de operaciones estratégico de las dos grandes potencias, y que la bipolaridad EE UU-URSS, que ha venido funcionando con toda su complejidad desde los años cuarenta, está ahora tomando un signo nuevo e imprevisible. La pérdida de valor estratégico del Mediterráneo no significa, según Manuel Azcárate, que la contradicción haya desaparecido en dicha zona. Las superpotencias tienden a reforzar sus zonas de influencia, se arriesgan a choques militares eventuales y en la mayor parte de los países mediterráneos se manifiesta una tendencia a alejarse del alineamiento hacia cualquiera de los bloques. «Con la invasión. de Afganistán», precisó Manuel Azcárate, «la URSS ha logrado ciertas ventajas estratégicas, pero por primera vez se ha enajenado ».
