El Ayuntamiento de Lugo se resiste a municipalizar los autobuses

Con la decisión adoptada por la Corporación municipal de Lugo en su último pleno, de no municipalizar el servicio de los autobuses urbanos que atraviesan por un importante conflicto desde hace varios meses, la corporación lucense ha dado un paso mas hacia la dejación de los servicios públicos en manos privadas, lo que ha creado un notable malestar en varios sectores de la capital.El Ayuntamiento lucense no tiene municipalizado ni uno solo de los servicios públicos, pese a la oposición de los nuevos concejales de izquierda, lo que ha llevado al concejal nacionalista Manuel Castiñeiras a aconsejar que «si no es capaz de gestionar un servicio, contratemos una sociedad anónima que nos gestione el ayuntamiento». La no municipalización de los servicios públicos está creando serios problemas a la actual corporación municipal, de forma especial los de limpiezas y autobuses urbanos.

El segundo de ellos comenzó cuando la empresa concesionarla retiró algunos de los servicios que funcionaban en la capital, alegando que la circulación de éstos no era rentable. Inmediatamente se dejaron oír las protestas de los vecinos de barrios periféricos, quienes hicieron llegar hasta la corporación su malestar. Entonces, la empresa adoptó la decisión de mantener los autobuses en algunas zonas los días laborables, suprimiéndolos los domingos, al mismo tiempo que en otras hacía variar el horario, distanciando más las llegadas y salidas. Partidos políticos, sindicatos y asociaciones de vecinos se unieron a las protestas.

Los trabajadores, que todavía no han cobrado la paga extraordinaria de julio, creen que parte de los ingresos de los autobuses están destinados a amortizar otros coches de la misma empresa que realizan recorridos por zonas rurales.

Posibles cambios en Vigo

Si las gestiones que mantiene con su empresa no prosperan en el sentido de continuar trabajando en ella pese a su cargo oficial, el concejal del Ayuntamiento de Vigo por la coalición Unidad Gallega (UG), Teodoro Piñeiro, del Partido Obrero Gallego (POG), dimitirá de su cargo, según informa Antoñio Ojea.