El 9,6% de aumento, tope establecido para los funcionarios
En un intento de moderar las peticiones salariales para la nueva ronda de conversaciones, el Gobierno conservador de la señora Thatcher ha establecido un tope de un solo dígito, exactamente el 9,6%, en los aumentos de los sueldos de los funcionarios del Estado y empleados del sector público.Los ocho sindicatos, que representan a funcionarios y empleados de compañías nacionalizadas, tienen la intención de poner el grito en el cielo ante esta imposición.
Pero el Gobierno piensa mantenerse totalmente firme en este tope. Los ministros económicos afirman repetidamente que el año terminará con una inflación del 16,5 %, y la primera ministra ha declarado que una de las causas principales de las abultadas cifras de desempleo que padece el país hay que encontrarla en los desmesurados incrementos salariales, que han rebasado la media del 20%
Los políticos conservadores esperan que si consiguen mantener las subidas de funcionarios y empleados del sector público por debajo del 10%, el sector privado se verá obligado de una u otra forma a seguir el ejemplo.
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