Debré, candidato a la presidencia francesa
El ex primer ministro del general Charles de Gaulle Michel Debré anunció ayer que será candidato a la Presidencia de la República en 1981. Con esta iniciativa personal, Debré pone en entredicho la eventual candidatura del líder oficial del neogaullismo, Jacques Chirac; crea disensiones serias en esta componente de la mayoría gubernamental, a la que él pertenece, y, en definitiva, puede favorecer al giscardismo.
Michel Debré, el «arcángel» del gaullismo, es el velador más celoso de la herencia del general: grandeur, patria, independencia, familia, sacrificio, son los lemas con los que no,ha dejado de atizar el fuego sagrado de «una cierta idea de francia» desde el día que falleció el general De Gaulle. Actualmente, Debré estima que el giscardismo es el causante directo de «la degradación constante de los asuntos públicos». Debré, como los comunistas y los socialistas, lo denuncia todo: la política interior, porque el poder no hace tomar conciencia a los ciudadanos de que «vivimos en guerra económica»; la política europea, porque considera que el Gobierno está diluyendo la sustancia de la patria francesa con esa «píldora» tecnocrática y supranacional que es, a su entender, la Comunidad Económica Europea (CEE).
Para Debré, la única alternativa para el país sería el «recurso» dramático gaullista, como en los tiempos de la liberación, o como en 1958, cuando De Gaulle retornó al poder. Esa vocación de «recurso», Debré piensa que ha dejado de ser encarnada por el chiraquismo, que de unos meses a esta parte se manifiesta menos virulento contra el giscardismo.
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