El club Liceo, de La Coruña, quiere revolucionar el hockey sobre patines

El Liceo, de La Coruña, está decidido a hacer la revolución en el mundo del hockey sobre patines. Ascendido a la División de Honor el año pasado, incorporó a sus filas a dos jugadores portugueses y consiguió llevar mucho público a su cancha y terminar en una buena clasificación. Para la temporada próxima se propone incorporar al equipo a dos de los más prestigiosos jugadores del mundo, el portugués Cristiano y el argentino Martinazzo. Con ellos y algunos refuerzos más, confía en estar en la lucha por el título.

La idea del Liceo no tiene un origen prioritariamente publicitario, como fue el caso del Calpisa en balonmano. Calpisa es el nombre de una empresa inmobiliaria que decidió un día patrocinar al equipo de balonmano de Alicante, hasta entonces llamado Obras del Puerto. Invirtió el suficiente dinero para conseguir el concurso de muchos de los mejores jugadores de España y formó un equipo que dominó claramente en el balonmano español durante varios años.Fundado hace siete años, el Liceo se presentó en la División de Honor la temporada pasada. Decidido a no ser un simple comparsa, incorporó a dos buenos jugadores portugueses, los hermanos Fernando y Antonio Gomes Acosta. Incorporarlos no le supuso un gran desembolso, pues en hockey sobre patines no hay traspaso y en todo el año sólo cobraron 1.200.000 pesetas entre los dos. Ambos continuaron viviendo en Oporto y todos los viernes se desplazaban a La Coruña para jugar el domingo con su equipo. Gracias a ellos y a algún otro pequeño refuerzo, el Liceo realizó una más que digna campaña y consiguió llevar mucha gente al Palacio de los Deportes de La Coruña. En tres partidos llenó las casi 6.000 plazas de este recinto y ha cerrado la temporada con una asistencia de público que supone nada menos que el doble que la suma de la conseguida por todos los demás equipos de la División de Honor.

Para este año, el Liceo es más ambicioso. Los hermanos Gomes Acosta se marchan, pero el Liceo los sustituye con el mejor jugador de Portugal (Cristiano, también del Oporto) y el mejor del mundo, el argentino Daniel Martinazzo. Además incorpora al entrenador del Voltregá, Pedro Gallén, considerado el mejor de España, y otros tres jugadores, procedentes del Claret de Sevilla, el Voltregá y el Tordera. Juan Carlos Rodríguez, gerente del club, estima que con este grupo el Liceo debe ser, corno mínimo, subcampeón de la Liga, y que incluso podría robarle el título al Barcelona.

Los desembolsos van a ser mayores que el año pasado, porque Cristiano y Martinazzo cobrarán más que los hermanos Gomes Acosta: unos dos millones el argentino y algo menos el portugués. Aunque no hay traspaso y el nuevo entrenador no ganará mucho (vivirá la primera mitad de la semana en Barcelona, para atender una fábrica de su propiedad, y dejará el entrenamiento del martes programado, para que lo dirija su auxiliar), los desembolsos serán más altos. El Liceo busca ahora otra casa publicitaria que quiera poner, cuando menos, cuatro millones, cantidad ampliable si el equipo gana alguno de los dos títulos.

Por lo demás, el Liceo cuenta con 2.000 socios, lo que le deja unos ingresos fijos de cinco millones anuales; pero el presupuesto para la temporada llega a los veinte. Publicidad en las vallas de la cancha y, sobre todo, las taquillas deben servir para completar los ingresos. El club hace un esfuerzo importante, pero, en opinión de Juan Carlos Rodríguez, «es la única manera de extender este deporte en Galicia. Traemos espectáculo, la gente se aficiona y pronto tendremos un buen equipo sin necesidad de recurrir a gente de fuera. Por el momento ya tenemos un equipo sub-21 y dos juveniles, y una escuela de patinaje con doscientos chicos, con los que formamos varios equipos infantiles».

A salvo de Cristiano y Martinazzo, no hay profesionales en e equipo: «A los que vienen de fuera se les paga la estancia y se les pro cura buscar un trabajo, pero profesionales no hay. Cobran una muy pequeña compensación, una cantidad mensual con la que nadie puede vivir».

Poco a poco, el Liceo se ha con vertido en un equipo de prestigio El próximo día 30 partirá para Argentina, donde jugará un torneo internacional con la selección de aquel país, campeona del mundo; la de Chile y el Rácing de Bueno Aires. La selección argentina explotó su título mundial con una gira por Europa, en el curso de la cual sólo sufrió una derrota, justamente ante el Liceo. Eso le ha servido al club gallego para ser invitado a este torneo. En el curso de su estancia en Buenos Aires se formalizará el contrato de Martinazzo.