La UCD andaluza reafirma su disposición a encontrar fórmulas jurídicas para desbloquear la autonomía

«Creo que, en el fondo, Rafael Escuredo está deseoso de encontrar soluciones a la actual situación, que es absolutamente insostenible », afirmó ayer, en conferencia de Prensa, el presidente del Comité Regional de Andalucía de la Unión de Centro Democrático (UCD), Félix Pérez Miyares, que ratificó la oferta de su partido para negociar con la izquierda andaluza y, de modo especial, con el PSOE, la fórmula jurídica necesaria para que esta región consiga la autonomía plena en el plazo de tiempo más breve posible.

Confirmando lo adelantado días atrás por EL PAIS, Pérez Miyares y los vicepresidentes de la UCD andaluza, Soledad Becerril y Luis Merino, subrayaron la buena disposición centrista a encontrar, mediante negociaciones con los partidos de izquierda, el mecanismo que, obviando la dialéctica 143-151, facilite la consecución por Andalucía de un autogobierno dotado de instituciones al máximo nivel y de competencia hasta el techo más elevado. Los centristas andaluces facilitarán de inmediato la concertación de la tan buscada entrevista Suárez-Escuredo.

Nueva interpretación

En apoyo de la viabilidad de esa tesis, los líderes ucedistas explicaron que «nuestra Constitución es nueva y está, en consecuencia, poco desarrollada, sobre todo en lo que se refiere al título VIII. Se trata de no interpretarla literalmente, sino de encontrar en ella la formulación que necesitamos para resolver el problema andaluz. De modo informal se citaron como posibles vías para lograr la autonomía andaluza acogerse a lo preceptuado en los artículos 144 (que recientemente ha sido propugnado por Manuel Clavero en este mismo sentido) y 150 del texto constitucional.Con esta oferta puede decirse que UCD, tras el Congreso recién celebrado en Torremolinos, inicia una postura de ofensiva en relación con el proceso autonómico andaluz, postura confirmada por la decisión, anunciada también ayer, de afianzar y ampliar su participación en la Junta de Andalucía, asegurar su presencia incluso física en la sede de ese organismo (actualmente, los consejeros centristas no mantienen oficinas en Sevilla) e inaugurar una etapa de mayor contacto con los medios de comunicación, al tiempo que se instalará en Sevilla una sede del comité regional, hasta ahora inexistente.

Queda por conocer la reacción de los partidos de izquierda a este ofrecimiento centrista. Ayer fue imposible conocer la opinión de Rafael Escuredo, presidente de la Junta, que permaneció reunido durante toda la jornada con el consejo permamente del ente preautonómico. Como es sabido, Escuredo ha insistido reiteradamente en que, mientras él sea presidente, la autonomía ha de caminar obligatoriamente por la vía del artículo 151.