UCD puede quedarse con un miembro menos en cada comisión del Congreso
El diputado centrista por Badajoz Enrique Sánchez de León «tiene tomada la decisión de dimitir» según fuentes allegadas al citado diputado y ex ministro de Sanidad y Seguridad Social. Por su parte, uno de los barones de Unión de Centro Democrático (UCD) confirmó a EL PAIS, tras hablar con Sánchez de León, su impresión sobre la muy probable dimisión. Entre otras consecuencias del paso al Grupo Mixto del diputado extremeño -que podría arrastrar la de su paisana Blanca Morenas- se valora la pérdida por UCD de uno de sus diecisiete miembros en cada una de las comisiones del Congreso.
Según el reglamento provisional del Congreso de los Diputados, las comisiones de esta Cámara se constituyen «en proporción a la importancia numérica» de los grupos parlamentarios. La aplicación de este criterio consiste en que cada fracción de diez diputados da derecho a un comisionado, adjudicándose uno más a las fracciones de cada grupo iguales o superiores a cinco diputados.De acuerdo con esto, los 36 miembros de cada comisión se distribuyen así: diecisiete centristas (correspondientes a 168 diputados, hoy 165); doce socialistas (para 121 diputados, hoy 120); dos comunistas (para veintitrés diputados), y uno por cada uno de los grupos Mixto (inicialmente con nueve diputados, y hoy con trece), Coalición Democrática (nueve), Minoría Calatana (ocho), PNV (siete) y Andalucista (cinco diputados).
La salida de Enrique Sánchez de León del grupo centrista dejaría a UCD con sólo 164 diputados. Si se produjera la posible dimisión también de Dolores Blanca Morenas, el grupo centrista quedaría con 163 diputados. En uno y otro caso, el número de miembros de UCD en las comisiones del Congreso se reduciría automáticamente a dieciséis, con las consecuencias que est entrañaría al partido gubernamental para la obtención de mayorías suficientes en el trámite parlamentario de los acuerdos en comisión.
Esta repercusión parlamentaria de la decisión de Sánchez de León, en el delicado momento que atraviesa UCD, se une a las consecuencias sobre el partido en Extremadura, en donde la salida del ex ministro podría acarrear la pérdida de gran parte de los militantes con que UCD cuenta en aquella región.
Entre las causas que podrían desencadenar la dimisión d Sánchez de León, fuentes centristas valoran, en el marco de la pugna por controlar el aparato del partido en Extremadura, la enemistad surgida con el también ex ministro y diputado por Badajoz Alberto Ollart, a quien se atribuye la iniciativa de convocar una reunión del comité ejecutivo centrista extremeño aprovechando un viaje al extranjero de Sánchez de León. Según estas fuentes, Oliart controla, a través del actual presidente de la UCD extremeña, Luis Ramallo, el aparato del partido gubernamental, mientras las bases de UCD están con Sánchez de León.
La situación a la que ha llegado la disidencia del ex ministro de Sanidad y Seguridad Social con la dirección de UCD parece irreversible. La condición de presidente de Campsa que concurre en Enrique Sánchez de León ha venido siendo considerada en medios gubernamentales como un dato disuasorio que impediría la ruptura con UCD, dadas las dificultades económicas personales en que un eventual cese en el citado cargo podrían situarle. Sin embargo, Enrique Sánchez de León estaría dispuesto a afrontar estos problemas si no se resuelve su situación en UCD.
Difícil sustituto para Estella
Una nueva dificultad para el grupo centrista es, al parecer, la sustitución del diputado Alberto Estella al frente de la comisión de investigación de RTVE. La dimisión de Estella como presidente de esta comisión desencadenará una nueva elección, en la que no es probable que el candidato centrista cuente con el apoyo de ningún grupo.
