Los jugadores del Getafe niegan haber vendido el partido con el Coruña

Ocho jugadores del Getafe prestaron ayer declaración ante el Comité de Competición, que previamente les citó para aclarar cualquier presunta irregularidad en torno al partido que los getafeños disputaron en la última jornada de Liga, frente al Coruña, en Las Margaritas. Los ocho jugadores del Getafe aseguraron que no recibieron dinero alguno por perder ante el Coruña y que sí tenían la oferta de dos millones de pesetas por ganar, dinero que fue prometido por un aficionado de Vigo en una llamada telefónica que recibió el jugador del Getafe Cortés, en su domicilio, tres días antes del partido con el Coruña.Los jugadores que declararon ante el Comité de Competición fueron Alfonso, Martínez, Roberto Cino, Arévalo, Cortés, Carmelín, Alvarez y Ocaña. No se descarta la posibilidad de que algunos de estos jugadores sean citados de nuevo a declarar. Según parece, existen algunas contradicciones en las manifestaciones de algunos de ellos.

La historia que contaron los jugadores del Getafe, según se desprende de sus palabras, se concreta en los partidos que jugaron en su campo frente al Huelva y Coruña, respectivamente, y sobre los que el Comité de Competición investiga. Cortés recibió una llamada telefónica de un aficionado de Vigo -dato que contradice el deseo del comunicante de pasar totalmente inadvertido y sin posibilidad de identificarse-, en la que se te prometió un millón de pesetas para todos sus compañeros del Getafe si ganaban al Huelva en Las Margaritas. El Getafe perdió este partido por tres goles a uno. El aficionado de Vigo presenció este partido y se dio a conocer a Cortés. Antes del encuentro concertaron en verse, para entregar el dinero, en un lugar determinado del campo, en una de sus puertas. Cortés aseguró en una ocasión que se presentó en dicho lugar y la persona que esperaba no estaba en el lugar señalado.

Cortés indicó que la persona que le prometió el dinero es un hombre de unos cincuenta años y bien vestido, con acento gallego cerrado. Algunos jugadores parece que le echaron en cara a Cortés que no asegurara la percepción del dinero prometido, al obligar a depositarlo en algún lugar determinado.

La historia, que surgió con motivo del partido Getafe-Huelva, se repitió en el Getafe-Coruña, aunque en esta ocasión el dinero prometido en primera instancia fue de un millón y medio de pesetas y finalmente se elevó a dos millones. La misma persona se encargó de realizar las llamadas telefónicas, repitió que llamaba desde Vigo y se presentó en el campo de Las Margaritas antes del partido y habló con Cortés.