La renta per cápita española creció un 18% el año pasado

La renta nacional por habitante en 1979 ascendió a 325.603,50 pesetas, lo cual supone un aumento del 18% sobre la cifra del año anterior, que fue sólo de 281.049 pesetas, informa el Instituto Nacional de Estadística (INE), según datos disponibles a mediados de marzo.En dólares, esta cifra sufrió un aumento del 32%. Esta diferencia entre el aumento en pesetas y el aumento en dólares viene provocado por la apreciación de la peseta sufrida en el pasado año con respecto al dólar estadounidense, y que fue de aproximadamente el 14%.

De acuerdo con las informaciones disponibles para 1979, el Servicio de Contabilidad Nacional del INE ha realizado una estimación de las cifras de avance de las cuentas nacionales referentes al pasado año. Según estas cifras, el producto interior bruto (PIB) al coste de factores habrá aumentado un 1,2% sobre el año 1978.

Este bajo crecimiento queda justificado, en gran medida, por el decrecimiento de más de cuatro puntos de la rama agraria y pesquera, así como un crecimiento en la rama de los servicios (2%) de la mitad de lo que creció en 1978. La industria, por el contrario, ha crecido más de un punto, aunque ello no ha sido suficiente para compensar totalmente el mal año de la agricultura. El aumento de 1,3 puntos de las ramas industriales viene en parte explicado por el menor ritmo de decrecimiento de la construcción en 1979 que en el año anterior; la industria, excluyendo la construcción, creció un 2%.

Por el lado de la demanda, el crecimiento del consumo privado interior se ha mantenido a niveles análogos a los de 1978, a pesar de haber sido un mal año en cuanto a entradas de turistas, presentando un crecimiento del 1,9%.

El consumo público ha seguido la tónica de contención que la Administración fijó al principio del año. Su crecimiento ha sido algo menor (3,5 %)que en 1978.

La formación bruta de capital ha crecido un 0,7%, registrando una práctica estabilidad en lo que se refiere a la formación bruta de capital fijo y un fuerte crecimiento en la formación de stocks. Esta evolución de la inversión en capital fijo contrasta favorablemente con la disminución registrada en 1978, que fue del -3,2%.

A pesar de que la exportación sigue siendo el elemento más dinámico de la demanda -continúa el informe del INE-, su crecimiento en 1979 ha sido menos favorable que en. 1978. La importación, por el contrario, ha crecido mucho más fuertemente que el año 1978, en un movimiento auspiciado por la apreciación de la peseta durante el pasado año.

En cuanto a los precios, el deflactor general del PIB a precios de mercado ha crecido en 1979 en un 15,5%, contra un crecimiento del 20,8% en 1978, siendo este uno de los rasgos más favorables de la evolución de la economía en 1979.

Finalmente, en lo que a la evolución de las rentas se refiere, las remuneraciones de los asalariados han crecido el 17,5%. Es decir, algo más que el excedente neto de exportación, que sólo ascendió un 15,2%, manteniendo la tendencia de la estructura de distribución de la renta.