Joven herido al término de una persecución policial

Un joven de veintisiete años resultó herido en el transcurso de una persecución policial que se había iniciado unos momentos antes en circunstancias oscuras. Según el gabinete de prensa de la Jefatura Superior de Policía, Joaquín Sánchez Mejías y su acompañante, Mónica Ozamiz, se negaron a exhibir su documentación a requerimiento de los agentes, y emprendieron la huida sin que, aparentemente, mediase ningún motivo.

Una llamada telefónica al 091 había denunciado la presencia de unos individuos sospechosos que merodeaban entre los coches estacionados en la calle de Zurita. Posteriormente, se presentaron dos coches patrulla. Al llegar, los policías avistaron a dos personas que ocupaban un Seat-850 estacionado en la calle. Cuando les fue solicitada la documentación, se negaron a mostrarla «si antes no se identificaban los agentes, a pesar de ir de uniforme algunos de ellos». Repentinamente, el conductor del automóvil «arrancó violentamente y estuvo a punto de arrollar al cabo de la Policía Nacional».En la persecución posterior, los fugitivos pasaron junto a la comisaría de Mediodía, donde el centinela trató de cortarles el paso. Finalmente, «hubo de saltar a la acera para evitar ser atropellado, a la vez que disparaba su arma contra el vehículo», que fue a chocar contra otros estacionados en las proximidades. El conductor resultó herido y su acompañante ilesa. Se ha comprobado que el automóvil que ocupaba aquél es propiedad de su padre.