Monzón: 'No acudiremos, por ahora, al Parlamento vasco"

Los parlamentarios vascos electos de Herri Batasuna (HB), entre los que se encontraban Telesforo Monzón, Francisco Letamendía, Jokin Gorostidi, Jon Idigoras y Miguel Castells, celebraron ayer en Bilbao una rueda de prensa en la que, a la vista de los resultados, se proclamaron la segunda fuerza política de Euskadi y la primera de izquierdas, y «la opción más honesta, seria y coherente del País Vasco», y anunciaron su decisión de no acudir por ahora al Parlamento vasco.

En medio de un optimismo contenido, los parlamentarios electos de HB señalaron que «a pesar de haber tenido los handicaps de un boicot en los medios informativos, que se empeñaban en hacernos desaparecer antes de tiempo, y de la escasez de medios, hemos demostrado que tenemos más de 150.000 personas que apoyan nuestra línea política de ruptura con el franquismo reformado que ha quedado así consolidada».Al comentar la nueva correlación de fuerzas surgida de estas elecciones y el triunfo en la misma de la opción nacionalista, Telesforo Monzón afirmó que celebraba esta victoria porque significa un gran impulso del patriotismo vasco. «Somos», dijo, «entre las tres fuerzas los tres tercios del país que piensa que la única soberanía radica en Euskadi, y podemos dar mucho dolor de cabeza.»

Esta afirmación de Monzón suscitó el tema del controvertido frente abertzale, que, en opinión de Francisco Letamendía, es hoy por hoy inviable. «Nosotros pensamos», precisó, «que hay en Euskadi una única comunidad y distintas clases sociales. Esta última evidencia nos impide converger con el PNV. Dentro también de los partidos abertzales hay otros (se refería a Euskadiko Ezkerra) que han aceptado el. marco del Estatuto impuesto por los hijos del franquismo, que nosotros rechazamos.» En este mismo sentido, Telesforo Monzón añadió que en Euskadi hay dos místicas: la nacional y la social, que no pueden excluirse la una a la otra. «Si por frente nacional no se entiende una suma de siglas sino la aceptación de unos principios nacionales y sociales mínimos, la posibilidad, por ejemplo, para converger con el PNV en base a un programa social a relativo corto plazo, existe. Los puntos de Herri Batasuna son razonables y aceptables por los partidos abertzales y pueden dar lugar, todavía hoy, a una solución para la normalización de Euskadi y posibilitar que callen las armas».

Reiteraron los electos de HB la decisión de la coalición de no acudir hoy por hoy al Parlamento, «porque», señaló Ortxi, «no puede dar satisfacción, con los techos de la Constitución y Estatuto, a ninguno de los puntos de la alternativa de Herri Batasuna. Ni el Parlamento ni el Gobierno vasco, o, lo que es lo mismo, el PNV, tiene poder político suficiente para dar satisfacción a los cinco puntos. El interlocutor es el Gobierno de Madrid, que se niega a dialogar con nosotros. Sí cabe, sin embargo, que un frente nacional reclame esas cinco condiciones, que son puntos que objetivamente asume la base popular del PNV.»