Pérez de Tudela, en el Congreso
Perplejo me he quedado al leer, en EL PAIS, que su señoría el diputado socialista señor Busquets, me mencionó en la Comisión de Interior el pasado día 21 de febrero. Y me mencionó de tal forma que el ministro -dice el cronista- tuvo que defenderme.Naturalmente que le agradezco al ministro del Interior que me defendiera. Pero, ¿de qué me acusaba? ¿A qué se refería su señoría cuando, supongo en la Comisión de Interior se trataban temas ajenos al alpinismo, al rescate alpino, a la exploración geográfica u otros en los que mi persona es personaje público?
Yo pensaba que una comisión parlamentaria es asunto muy serio. Y también pensaba que los parlamentarios no hablaban como en las tertulias de café: Creía que cuando hablaban, preguntaban o interpelaban, sabían lo que preguntaban y no perdían demasiado el tiempo en hablar de personajes de moda, cuando nada tenían que ver con temas tan serios y trascendentes como los de la Comisión de Interior en la actualidad.
No sé qué dijo su señoría sobre mi persona para que el ministro tuviera que defender al profesor de la escuela policial y antiguo escalador -como dijo EL PAIS-, ni tampoco cómo me defendió el ministro. Supongo que el ministro me defendería diciendo: «iUn poco de seriedad, señores parlamentarios, que el explorador Pérez de Tudela se escapa del asunto!». O algo así. Porque todo lo demás es puro desatino.
¿Qué información tiene el señor Busquets sobre mi persona? ¿Quién informa tan peregrinamente al señor Busquets?
Por favor, un poco de seriedad, un poco de rigor. Ser parlamentario exige todo eso. Mi vida la contaré otro día.
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