Posible paralización de las dimisiones en UCD

A la hora del cierre de esta edición continuaba reunido el consejo político provincial de UCD, que debería adoptar una postura definitiva en relación con la decisión del ejecutivo nacional del partido centrista de reconducir los procesos autonómicos a la vía del artículo 143 de la Constitución y abstenerse en el referéndum andaluz. Diversas fuentes centristas, consultadas por EL PAÍS momentos antes de la reunión, aseguraban que todo dependía de la actitud de Clavero y que éste se decantarla por mantenerse en UCD, conseguir que UCD-Sevilla proteste públicamente por la postura de la ejecutiva e inhibirse descaradamente en la campaña pro abstención en el referéndum.

En apoyo de esta hipótesis estaría la consideración, nada desdeñable, de que una dimisión en masa de cargos públicos dejaría numerosas instituciones de la vida política en manos de la izquierda. Paralelamente continúan las visitas de líderes políticos a Andalucía para analizar in situ los últimos acontecimientos. Si el viernes expuso aquí Alfonso Guerra la posición socialista, ayer fue Manuel Fraga quien se desplazó a Sevilla para expresar su identificación con el giro de UCD en las autonomías.Respecto a las posibles dimisiones en UCD, las fuentes antes dichas no ocultaban, sin embargo, las interrogantes que una posición de este tipo abriría en el futuro inmediato de la UCD andaluza, poniendo el ejemplo de la contradicción en que se encontrarían aquellos concejales decididamente andalucistas que, por disciplina de partido, estarían obligados a defender la vía del artículo 143 en los numerosos plenos extraordinarios de ayuntamientos que van a convocarse en los próximos días (de hecho, el de Sevilla capital parece que va a celebrarse el miércoles).

El ex ministro de Cultura Manuel Clavero, a quien el Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Sevilla acaba de concederle su medalla de oro, ha reiterado desde su llegada a esta capital que su trayectoria política dependerá del examen colectivo de la situación que la plana mayor del centrismo de Sevilla estaba haciendo anoche. «Hoy lo decidiremos entre todos», comentó ayer al corresponsal de EL PAÍS.

«Dije a mi llegada: sigo en UCD, pero no dije seguiré». declaró en tono enigmático el señor Clavero. Preguntado si no temía a las consecuencias que podrían derivarse, en caso de continuar en UCD, de su propósito de votar afirmativamente en el referéndum andaluz, señaló: «Ya me lo dirán si no les gusta. Lo que no puedo hacer es haber dejado de ser ministro para ahora predicar la abstención en el referéndum.»

Mientras los dirigentes provinciales de UCD guardan celosamente en secreto el sentido Final de su decisión, continúan en los pueblos las reacciones opuestas al ejecutivo. El diputado provincial centrista Francisco Jesús Rodríguez presentó en el Ayuntamiento de Osuna, del que es concejal, una moción de censura contra su partido. En Lebrija, los concejales de UCD no acudieron al pleno municipal extraordinario, pero expresaron al alcalde su disconformidad con la UCD nacional.

Otro polo de atención política estuvo centrado ayer en las declaraciones hechas por el secretario de Estado para la Información, Josep Meliá, en el sentido de que la fecha del 28 de febrero para el referéndum andaluz era una simple propuesta de la Junta de Andalucía y que el Gobierno no ha pensado aún si hará campaña institucional en favor del referéndum. En honor a la verdad, hay que aclarar que el 28 de febrero fue, en efecto, acordado por la Junta en un pleno celebrado en Almería. pero previamente había sido decidido en una entrevista Suárez-Escuredo. En cuanto a la campaña, hace muy pocos días el ministro de Administración Territorial, Antonio Fontán, la garantizaba al consejero del Interior del organismo preautonómico.

«El 28 de febrero y el artículo 151 se han convertido en mitos para Andalucía», declaró, por su parte, el presidente de Alianza Popular, Manuel Fraga, en el curso de una rueda de prensa celebrada ayer en Sevilla. El líder derechista aseguró que «hablar de política en la Andalucía de 1980 es una gran responsabilidad» y elogió sin reservas la decisión sobre las autonomías adoptada por UCD.

«Autonomías sí, pero no destrucción del país», añadió Fraga Iribarne, quien subrayó que para AP España continúa siendo lo único importante y que Clavero se había equivocado con su actitud de ahora, aunque ya su política anterior estaba llena de imprecisiones. Se negó, en cambio, a definir la posición que AP de Andalucía mantendrá sobre el referéndum autonómico y que no será hecha pública hasta después del congreso regional que tendrá lugar los días 9 y 10 de febrero en Fuengirola (Málaga).

Fraga desmintió que AP vaya a pactar con UCD, tal y como pronosticó el viernes Alfonso Guerra, aunque no quiso informar sobre el contenido de su reciente entrevista con Suárez.