Madrid-Barcelona, adelanto del otoño caliente

Cerca de dos mil millones de presupuesto suman Real Madrid y Barcelona. Cerca de 1.400 millones de déficit juntan ambas entidades. Los dos ricos más pobres, o los dos pobres más ricos, según se mire, se enfrentarán el domingo en el Bernabéu. El calendario confeccionado por la Federación Española, que lo firmaría el propio Suárez, nos ha proporcionado una rentrée llena de emociones. Aún no nos hemos quitado de encima los calores vacacionales cuando ya nos han entrado los acaloramientos futbolísticos. O, lo que es lo mismo, al otoño caliente que nos anuncian le estamos alargando la mecha para que tarde en estallar. El domingo el campo de Vallecas se llenó por vez primera hasta los topes.

No nos van a dar tiempo a reponemos. Empezó la cosa con la visita del Valencia y el domingo el equipo rojo de Madrid -el Rayo- se enfrentó al del poder de siempre. Vallecas, a reventar. Como en un mitin de las primeras elecciones. La ilusión de los dirigentes rayistas era contar con la sufrida afición vallecana, pero, a la hora de la verdad resultó que había casi tanta gente por ver a Cunningham como por ver a Morena. Ocho millones entraron en las taquillas del Rayo. Será, probablemente, el récord de la campaña. Para un club modesto ocho kilos son un buen reconfortante cuando los puntos se han ido hacia Concha Espina.Para el domingo vamos a tener el plato fuerte de la temporada. Dado que el Valencia y el Atlético de Madrid ya han asomado la cresta de la irregularidad hay que pensar que, como en años anteriores, al principio de la Liga todo va a estar entre culés y merengues.

El Barça, mientras ha sido más que un club, salvo el año del 0-5, siempre ha arrojado la toalla y ha dejado el título en manos de sus adversarios. En la presente campaña hay más ilusiones que nunca. Tras el mitin de la plaza de Sant Jaume, a costa de la despedida de Neeskens, a lo mejor resulta que tenía razón José Luis Núñez y el fichaje de Simonssen es mucho más rentable.

José Luis Núñez, que no es catalán de nacimiento, parece que le ha puesto seny a la cuestión de la pela, y de momento, o es un gran simulador, o es un genio, porque el club, según nos cuentan de cuando en cuando, comienza a tener una economía muy saneada. Núñez ha puesto a los jugadores a destajo como a sus encofradores, pero la cosa parece que funciona porque todos quieren dar el callo.

El defecto del Barça más que un club ha estado siempre en la falta de fe a la hora de la verdad. Ha sido un torero que ha intentado colocar siempre el estoque a paso de banderillas, y eso trae como consecuencia los pinchazos en hueso. El Barcelona que nos describen este año, además de adomarge en el tercio, parece que no vuelve la cara en la suerte natural que son los goles.

El Madrid nos dará la auténtica medida del nuevo Barcelona. El Barcelona servirá de auténtica piedra de toque para este Madrid con e que las segundas partes siempre son buenas. Para el Madrid el partido que llega a bote pronto es un suculento bocado, económicamente hablando. Más de veinte millones, quizá veinticinco, entrarán en la cuenta bancaria madridista, muy depauperada en los últimos años.

La contraliga está dispuesto a protagonizarla el Atlético de Madrid. Es la tercera vía. La ortodoxia va a estar entre Madrid y Barcelona y algún añadido, como podría ser de nuevo el Spórting. El Atlético arrancó bien en Alicante, pero se paró en seco en casa. Claro que peor es el panorama del Athlétic de Bilbao, que se ha traído un canastero austriaco para que maneje unos mimbres a los que falta flexibilidad. La Real dio el primer aviso serio en San Mamés. Lo peor es que encima la catedral ha perdido clientela y a este paso ni con milagros del santo de casa se va a poder ganar.