El régimen islámico iraní silencia a los comunistas

El régimen islámico de Irán decidió ayer silenciar a los órganos de expresión de los partidos marxistas y centristas, al tiempo que reprimía con gran dureza la rebelión kurda, en el oeste del país. Miles de manifestantes pidieron en las calles de Teherán la ejecución de los líderes autonomistas kurdos, que se han enfrentado en los últimos días con el Ejército regular y guardias revolucionarios.Por orden del fiscal revolucionario de Teherán, ayer fueron cerrados veintidós periódicos, entre ellos los órganos oficiales del partido Tudeh (comunista), del grupo guerrillero marxista fedayeen y del Frente Democrático Nacional (centrista).

Por otro lado, el ayatollah Qomi ordenó a todos los partidos y grupos políticos, «especialmente a aquellos cuya política está en contra de los deseos de la nación iraní», que depongan las armas tomadas de los polvorines durante la revolución de febrero último.

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