Tres atracos, en doce horas, con un herido grave y dos millones de botín
Entre la noche del viernes y el mediodía del sábado, poco más de doce horas, fueron perpetrados tres atracos, cuyas consecuencias más graves fueron las heridas de consideración sufridas por una de las víctimas. Los asaltantes, presumiblemente tres grupos distintos, hirieron de un disparo de escopeta a Manuel Muriana Gajate, un empleado de banca de 47 años, y se apoderaron de sendos botines de más de un millón de pesetas en una oficina bancaria y en una administración de Lotería.El primer suceso se produjo en las proximidades del palacio de El Pardo. A las diez de la noche del viernes, varios individuos abordaron a Manuel Muriana. Uno de ellos le pidió fuego y, según parece, sus cómplices le exigieron a continuación que les entregase el dinero que llevara. Como el señor Muriana se resistió, los atracadores efectuaron un disparo con una escopeta de cañones recortados, que le alcanzó en una cadera. En la Clínica Covesa, donde permanece internado, los médicos han calificado su estado como «muy grave».
A media mañana de ayer, una banda de tres jóvenes, armados con pistolas, atracaron la sucursal del Banco Hispano Americano de la calle de Cartagena. En el momento en que penetraron en el local, uno de ellos hizo un disparo de intimidación. Inmediatamente se apoderaron del dinero depositado en la caja y huyeron en un automóvil Seat 124. La cantidad sustraída se ha evaluado en casi un millón dtpesetas. El disparo no alcanzó a ninguno de los empleados o clientes. Este suceso parece guardar algunas afinidades con otro que había acaecido en la tarde del viernes, en que tres jóvenes, armados con una pistola, atracaron también una administración de Lotería de la avenida del Generalísimo, de donde lograron llevarse aproximadamente un millón de pesetas. Por el momento, ninguno de los tres casos ha podido ser resuelto por la policía.
Atracador detenido
En comunicado difundido ayer, la policía daba cuenta de la detención y entrega a la autoridad judicial del atracador de dieciocho años Salvador García Moreno, a quien se imputa un robo con intimidación en una tienda de ultramarinos. Para cometer el delito contó con la complicidad de Carlos Jesús Moya: él portaba una navaja, y éste, una pistola, al parecer, simulada. Ambos llegaron hasta el establecimiento a bordo de una motocicleta. Una vez que entraron, el detenido colocó su navaja en el costado derecho del dependiente; entre tanto, su compiche le intimidaba con la pistola.De esta manera consiguieron apoderarse de unas 9.000 pesetas; a continuación huyeron precipitadamente y abandonaron la motocicleta frente a la tienda.
Inmediatamente, el atracado comenzó a dar gritos de auxilio. Al oírlos, un transeúnte inició la persecución de Salvador García, al que vio esconderse en el interior de un portal. Seguidamente avisó al 091. Poco después, la policía lograba detener al delincuente en el rellano del piso quinto de la casa.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.