Cinco mil taxistas acompañan el cortejo fúnebre de su compañero asesinado

Alrededor de 5.000 taxistas acompañaron con sus vehículos el féretro de su compañero asesinado en la madrugada del sábado en las proximidades del parque del Conde de Orgaz, cercano a la avenida de América. El cortejo fúnebre, en el que viajaban los restos mortales, de Martín Crespo Elvira, burgalés, de 44 años, casado y con cuatro hijos, salió a las nueve de la mañana del Instituto Anatómico Forense, donde había sido depositado por orden del juez, y siguió viaje hasta el pueblo de Rabanera del Pilar, en Burgos, de donde era natural el taxista asesinado.Al cortejo fúnebre asistió una representación del Ayuntamiento, encabezada por José Luis Martín Palacín, responsable de Circulación y Transportes, y por Santiago Estrada, de la Policía Municipal. La viuda y los cuatro hijos del señor Crespo Elvira encabezaron la comitiva. Aunque en un principio estaba previsto que los taxistas acompañaran, el cuerpo de Crespo Elvira hasta Alcobendas, por acuerdo con las autoridades, y con el fin de no entorpecer la abundante circulación en esta carretera de salida, se acordó que aquéllos solamente acompañaran a la comitiva hasta la plaza de Castilla. No obstante, compañeros y amigos del taxista asesinado siguieron el cortejo fúnebre durante más kilómetros.

La comitiva se desarrolló en completo orden, a través del paseo del Prado, Castellana y Generalísimo. La Policía Municipal colaboró activamente, cortando el tráfico al paso del desfile funerario.

La mayoría de los taxis llevaban crespones y lazos negros en las manillas de las puertas y en las antenas.

En la plaza de Castilla, donde se rezó un responso y se guardó un minuto de silencio, se despidió el duelo. La comitiva prosiguió hasta Rabanera del Pilar, donde fue inhumado el cadáver.

Mientras tanto, aunque prosiguen las investigaciones, no se tiene noticias de que la policía haya logrado la detención del asesino o asesinos. Ni siquiera la localización de posibles sospechosos. Nada se ha explicado tampoco sobre los móviles del crimen, aunque parece ser que el asesino o asesinos dieron la dirección donde apareció el cadáver. Al indicarles el taxista el precio de la carrera, los ocupantes le encañonaron y le exigieron el dinero de la recaudación. Posiblemente el señor Crespo Elvira intentó defenderse y fue asesinado. Se cree que eran dos los ocupantes, toda vez que, además de los dos tiros que le dispararon en el cuello, tenía una profunda herida de arma blanca en la frente.

Vuelta al trabajo de los taxistas

La incorporación al trabajo de los taxistas se fue produciendo, de forma muy lenta e irregular, a partir de primeras horas de la tarde del domingo, después de que todo el sector madrileño guardara veinticuatro horas de paro total, en señal de protesta por el asesinato y por la falta de protección policial hacia su trabajo en horas nocturnas.Los taxistas afiliados y simpatizantes del Sindicato Unitario prosiguieron ayer una jornada más de paro, sin que sea posible precisar el número de taxistas que no trabajaron ayer, debido a las vacaciones y al permiso semanal reglamentario.

Todos los sindicatos y organizaciones del sector han acordado solicitar con carácter de urgencia una entrevista con el gobernador civil de la provincia, que actualmente se halla de vacaciones, para exigirle la colocación de puntos de vigilancia policiales con carácter continuo y la rehabilitación de los controles policiales nocturnos.