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Núñez, amo y señor en la asamblea del Barcelona

El presidente Núñez consiguió ayer en la asamblea del Fútbol Club Barcelona verse ratificado en su cargo, aumentar la cuota de socio, aprobar el presupuesto para la próxima campaña y la luz verde para la publicidad en las indumentarias de los jugadores. Eso, entre otros temas que también se trataron en la asamblea, y, como en todos, se aprobó lo que el presidente quiso.A las cinco de la tarde, en el propio salón del Palacio de Congresos de Barcelona, se preparaba el ambiente con la proyección de la película «Protagonista el soci», película de la final de Basilea; sólo faltaba la presencia de Simonsen -presentado por la mañana- para que el ambiente estuviera lo más proclive posible. A pesar de todo ello, y como es habitual, cada día se preocupan menos los compromisarios en todos los equipos por los temas a tratar y discutir en las asambleas. De 1.340 compromisarios, sólo acudieron 310 (63 menos que el año pasado),y salvo alguna pequeña oposición, todo fue asentimiento en las casi cinco horas de asamblea.

De entrada, el presidente Núñez, en su parlamento, recordó este año de su mandato, naturalmente haciendo hincapié en los éxitos deportivo y económico. Hizo mención especial a su intervención en la pasada asamblea del fútbol español, con televisión como fondo, aclarando a los compromisarios que su única intención era equiparar al Barcelona a otro equipo... (Real Madrid), que tiene un contrato de sesenta millones. El Barcelona de Núñez también quiere sesenta millones. Al margen de esto, el presidente Núñez pidió la adhesión de los compromisarios al Estatuto de Sau y puso su cargo a disposición de la asamblea, la que respondió con una ovación y tímidos gritos de Núñez, Núñez.

Entrando decididamente en materia económica, se da como definitiva la cifra de 771 millones como la deuda de la etapa Montal; se aprueba el balance del ejercicio anterior, con 206 millones de superávit, se aprueba el presupuesto para la próxima campaña, de 952.530.000 pesetas, y se aprueba también el aumento de cuotas en mil pesetas; de esta manera, la cuota del socio azulgrana queda en 3.500 pesetas, sin duda una de las más bajas de España. Por otra parte, se aprobó también el contacto comercial con una empresa (parece ser Meyba) para vestir a los jugadores barcelonistas en todos sus equipos, pagando 34 millones de pesetas y, a cambio, comprometiéndose el Barcelona a hacer jugar a todos sus equipos con el anagrama de esta firma, menos al primer equipo de fútbol, que sólo lo llevará en los chandals y en los entrenamientos.

Volviendo a la presentación de Simonsen, hay que decir que el jugador quedó sorprendido por el gran recibimiento de que fue objeto, y manifestó que era consciente de la responsabilidad que tenía al sustituir a un jugador de la categoría de Neeskens, pero que luchará mucho por conseguir que la afición olvide a tan gran jugador Simonsen fichó por tres años, y el Barcelona pagó por el traspaso noventa millones de pesetas al Borussia.

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