Un atracador herido se fuga de la clínica de La Concepción

Un presunto atracador de diecinueve años, José Luis Ecija del Moral, herido ayer por la mañana de un disparo en el pecho cuando trataba de escapar de la persecuw ción policial, logró fugarse a media tarde de la clínica de La Concepción, después de haber sido intervenido quirúrgicamente. El delincuente aprovechó la confusión originada en el centro hospitalario con la llegada del policía muerto en un atentado para huir con las sondas puestas.Hacia las 11. 10 de la mañana, José Luis Ecija, Francisco González Nieto y Emilio Díaz Valero hablan atracado la fábrica de celulosa Torres y Hostench, SA, donde bajo la amenaza de una escopeta de cañones recortados se apoderaron de cinco nóminas con un total de 96.778 pesetas.

Después de arrebatar también el bolso de mano al encargado de la fábrica, con varios talonarios y cheques bancarios en su interior, se dieron a la fuga. Un coche policial antiatracos lograba, sin embargo, localizarlos poco después en la plaza de Oriente.

Iniciada la persecución, los tres delincuentes intentaron refugiarse en el portal número 6 de la plaza de Oriente. Para conseguir su detención la policía efectuó varios disparos, uno de los cuales alcanzó en el tórax a José Luis Ecija, aunque, al parecer, no le produjo lesiones de carácter grave.

Durante los primeros momentos se creyó por relatos de algunos testigos, que los atracadores pudieran ser cuatro, por lo que se inspeccionó detenidamente el inmueble, mientras un helicóptero sobrevolaba la zona. En previsión de posibles enfrentamientos fueron cortadas al tráfico las calles próximas, mientras un fuerte dispositivo policial rodeaba el edificio. La búsqueda del posible cuarto atracador terminó sin resultados positivos hacia la una de la tarde, hora en que se normalizó la situación.

José Luis Ecija, que horas después conseguiría fugarse de la clínica de La Concepción sin que a última hora de ayer se tuviesen noticias acerca de su paradero, está considerado en medios policiales como delincuente habitual, y en los últimos tres meses ha sido detenido otras tantas veces por tráfico de estupefacientes y sustracción de turismo. El pasado 11 de junio fue puesto a disposición del juez de Peligrosidad Social, que decretó su libertad. Con anterioridad al presente año, había sido detenido once veces, la primera a los dieciséis años.

Emilio Díaz Valero, de veinticinco años, tiene asimismo un largo historial delictivo, con más de una veintena de detenciones (dos en los últimos 75 días) por robos, agresiones, tráfico de drogas y escándalo público. Por último, también Francisco González Nieto, de veintisiete años, tiene antecedentes por robos, hurtos, sustracciones de vehículos, daños y conducción ilegal.