_
_
_
_
_

Los comunistas consideran positivo el balance del pacto con el PSOE

La necesidad de reforzar las relaciones con el PSOE, que se mantienen con balance positivo; desarrollar conjuntamente un programa de actuación municipal, y transformar la situación actual de Coplaco, en el sentido de conseguir una mayor representación para las corporaciones locales que para la Administración central, fueron las conclusiones más importantes a que llegaron el pasado sábado los concejales comunistas de siete pueblos del sur de Madrid, reunidos en Pinto.

A la sesión asistieron Simón Sánchez Montero, secretario político de Madrid; Luis Larroque, vicepresidente de la Diputación Provincial; Carlos Sotos, miembro del comité provincial, y los concejales del partido pertenecientes a los Ayuntamientos de Getafe, Leganés, Fuenlabrada, Parla, Móstoles, Alcorcón y Pinto.Los concejales reunidos consideraron que los acuerdos municipales entre los dos partidos se mantienen con balance positivo, y en el caso de Leganés ya se ha puesto en marcha la línea de actuación conjunta; en Alcorcón hay puesto en marcha un plan de urgencia y han empezado las conversaciones para llegar a un acuerdo a largo plazo, y en Móstoles van a comenzar unas reuniones con idéntico objetivo. En este sentido, los reunidos ven como imprescindible fomentar la discusión del programa en cada municipio. Consideran que los programas electorales no contenían diferencias sustanciales, y después de los tres primeros meses de trabajo, que han servido para llegar a conocer los ayuntamientos por dentro, es necesario trazar una línea de actuación para los próximos cuatro años.

El segundo tema en importancia de los tratados fue la situación en Coplaco. Los concejales comunistas consideran que es necesario transformar la situación actual de este organismo y conseguir que la representación de las corporaciones locales sea mayor que la de la Administración central. Piensan que la comisión, aunque teóricamente es paritaria, en realidad bascula hacia el Estado, y que el decreto del primero de junio, de reforma de la ley del Area y la Comisión de Cooperación Provincial -que puede retrasar decisiones que corresponden a los municipios durante varios meses- constituye una injerencia de la Administración central

Estiman también que tanto el Gobierno Civil como las delegaciones provinciales de los ministerios mantienen unas competencias que verdaderamente corresponderían a la Diputación.

Por todo esto, los comunistas van a plantear a los socialistas una postura dura para luchar contra esta interferencia del Estado en cuestiones que deben ser competencia de los municipios. Los comunistas admiten como necesaria la participación de la Administración central, puesto que los ayuntamientos no disponen de recursos económicos suficientes, pero no a los niveles actuales.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_