Sospechas de que el siniestro de El Paso pudo ser provocado

Los hermanos Javier y José Luis Sansó Vives, propietarios del hotel El Paso, donde el pasado 25 de junio hallaron la muerte cuatro turistas finlandeses y una guía francesa en un incendio, han presentado una denuncia ante la policía de Palma por creer que el fuego que motivó el siniestro fue provocado por personas ajenas al establecimiento.

Los propietarios del hotel El Paso basan sus suposiciones en las declaraciones del conserje de noche, Rafael Gil, y en las de una mujer de la limpieza, que fueron los primeros en advertir el incendio. Según los dos testigos, éste se inició en varios lugares del salón Finlandia, situado en los bajos del hotel, y no prendió rápidamente en la moqueta, dando la sensación de que sobre ésta se hubiese lanzado un líquido inflamable, ya que la casa francesa que la instaló ha garantizado que fue fabricada con productos incombustibles.

Otras razones que alegan los propietarios en su denuncia sobre la supuesta intencionalidad del incendio, aparte de las sospechas sobre las personas ajenas al hotel que entraron durante esa noche en el mismo, es que, después del informe pericial de los técnicos, la instalación eléctrica estaba intacta, por lo que descartan la posibilidad de que fuera un cortocircuito el causante del incendio, en el que perdieron la vida cinco personas y resultaron heridas unas veinte.

Estas razones y también el hecho de que la policía gubernativa lograra detener pocos días después a un supuesto incendiario y autor de fuegos en un centenar de buzones y varios coches, situados precisamente en la zona de Son Armadams y el terreno en donde está ubicado el hotel, hacen que las sospechas de que el incendio fuera provocado wayan tomando consistencia. El detenido, G. Massanet, vive a pocos metros del hotel El Paso y cometía sus acciones delictivas siempre durante la noche, que fue cuando se inició el fuego que acabó con la vida de cinco personas.