Cristina Onassis
y su marido, el soviético Sergel Kauzov, han llegado a Atenas para pasar las vacaciones de verano. «Seguramente nos quedaremos aquí», comentó Cristina a los periodistas, «porque no creo que nos vayamos a Scorpios, pero, por favor, no anden detrás de nosotros las veinticuatro horas del día. Déjennos un poco de libertad y de vez en cuando les dedicaremos un rato», prometió. El matrimonio Onassis ordenó recientemente que rodearan la piscina de su villa con una lona, a fin de impedir que los reporteros pudieran hacer fotografías desde los tejados de las casas próximas.
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