Ducha en el Metro de Madrid
Con el ruego de su publicación en ese diario que usted dirige, le remito esta carta para expresar públicamente mi felicitación a los responsables del Metro de Madrid.Les felicito y alabo por la genial idea que han tenido al procurar un mayor bienestar y confort a todos los usuarios del Metro madrileño.
¡Y no es para menos! Pues no a todo el mundo se le ocurre la brillante idea de instalar uña «ducha natural» en una de las principales estaciones de la red del Metropolitano; me explicaré:
Desde hace algún tiempo se viene probando la instalación de una ducha de agua corriente en la línea ll (Ventas-Cuatro Caminos), concretamente en la estación de Sol, dirección Cuatro Caminos, salida a Mayor; supongo que todo ello con vistas al terriblemente caluroso verano que se avecina y en beneficio del tan sufrido usuario.
Es francamente atrayente el ver a la gente cómo hace todo tipo de cabriolas para tratar de esquivar el agua, que si bien en un principio cubría una mínima parte de la salida, en la actualidad la cubre por completo, de forma tal que las personas que por allí pasamos hemos de estar pendientes de atravesar la barrera de agua justo en el instante en que menos brote del techo (cada 1 de 2 segundos), u optar por buscar otra salida.
¡Gracias -una vez más- a los responsables del Metro por esta genial ocurrencia, que tiene como único fin el refrescar nuestro caluroso cuerpo en este abrasador verano que comienza, y todo ello por el mismo precio del billete normal, diez pesetas! Pero, «de verdad», preferimos achicharrarnos de calor que tener que hacer todo tipo de filigranas circenses, sobre todo si pensamos en las que ya de por sí hemos de hacer con el solo hecho de coger el Metro.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.