_
_
_
_

"Los siete grandes" afirman en Tokio que abrirán sus fronteras al éxodo vietnamita

Los jefes de Estado o de Gobierno de las siete primeras potencias del bloque económico occidental, reunidos en Tokio, aprobaron una resolución que intenta resolver la dramática situación de los 500.000 refugiados de Vietnam, Camboya y Laos, rechazados por otros países de la zona ante la problemática social y económica que representa para ellos la afluencia de refugiados y la indiferencia del resto de la comunidad internacional de naciones. Informa, desde la capital japonesa, nuestro enviado especial, Ramón Vilaró.

Más información
La ONU organiza el transporte de refugiados

Coincidiendo con esta resolución, la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), que inauguró ayer su conferencia de ministros de Exteriores en Bali (Indonesia), escuchó un llamamiento del presidente indonesio, Suharto, a Vietnam y la comunidad internacional para resolver el problema de los refugiados.La cumbre de Tokio no aportará elementos nuevos. Define, en cuatro puntos, el carácter humanitario de la acción, el factor de inestabilidad para la paz en la zona que origina el éxodo, la voluntad de continuar la financiación y la apertura de fronteras para recibir cierto número de refugiados -sin detallar importes ni número de personas- y la resolución de apoyar la celebración de una «conferencia internacional», probablemente para finales de julio, en Ginebra, bajo la responsabilidad de las Naciones Unidas.

Como medidas inmediatas, el viceprimer secretario de Asuntos Exteriores del Gobierno japonés, señor Tanaka, señaló que Tokio envió al Gobierno de Vietnam una petición para que cese la salida de refugiados, pero respetando la libertad de la libre emigración. Washington y otras capitales europeas habrían actuado en idéntica dirección.

Un grupo de veinte personalidades independientes de ocho países envió una solicitud a los dirigentes de la cumbre de Tokio para que faciliten medidas específicas y urgentes, como barcos y aviones, además de un plan posterior que acoja a los refugiados en campos especiales, en condiciones humanitarias aceptables. Se calcula que unas 100.000 personas han fallecido en los últimos meses víctimas de los residuos de las guerras casi permanentes que viven los países de la península indochina y de las tensiones raciales entre chinos y vietnamitas.

Entre las medidas concretas adoptadas, se encuentra una iniciativa del presidente norteamericano, Jimmy Carter, que ayer afirmó en Tokio que Estados Unidos duplicará la cifra de refugiados asiáticos admitidos mensualmente; esto es, acoger cerca de 14.000 emigrantes vietnamitas, laosianos y camboyanos.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Hasta el momento, EEUU ha acogido a 220.000 emigrantes del sureste asiático. La nueva medida adoptada por Carter costará alrededor de veintiséis millones de pesetas.

Por lo que se refiere a la cumbre de la ASEAN, Suharto declaró que «estoy seguro de que el Gobierno vietnamita tornará las medidas más eficaces y oportunas. Esto es algo absolutamente necesario para el mantenimiento de las buenas relaciones entre los Estados miembros de la ASEAN y Vietnam».

«Nos complacería comprobar que la comunidad internacional prestara mayor atención al tema de ¡os refugiados, al propio tiempo que emprendiera una serie de medidas más eficaces para resolver tan espinoso problema», añadió el presidente de Indonesia.

Actualmente son más de 300.000 los refugiados que se encuentran albergados temporalmente en campamentos en las naciones que componen esta asociación: Indonesia, Tailandia, Filipinas y Singapur, así como en la colonia británica de Hong Kong.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_