Voluntad de negociar y respeto a la Constitución

Los criterios políticos básicos con que Unión de Centro Democrático (UCD) aborda el proceso de negociación de los estatutos de autonomía vasco y catalán son la voluntad política de negociación hasta el máximo, el respeto a la Constitución, el propósito de alcanzar un alto nivel de autogobierno por parte de las comunidades autónomas y el deseo de perfilar un Estado de derecho moderno y eficaz. Así lo manifestó anoche el ministro para las Relaciones con las Cortes, Rafael Arias-Salgado.En la conferencia de prensa que se celebró en la sede de UCD, el señor Arias-Sangado estuvo acompañado de los diputados centristas Oscar Alzaga y Gabriel Cisneros. Algunos periodistas protestaron por la escasa información facilitada y por el hecho de que los documentos centristas no fueran distribuidos previamente a la conferencia de prensa, que, por otra parte, se inició con un retraso de casi tres cuartos de hora.

El señor Arias-Salgado calificó los desacuerdos centristas de flexibles y «enormemente matizados y graduados» y adaptados al procedimiento sui generis de discusión parlamentaria de los estatutos, que contempla la intervención de la Comisión Constitucional y de los delegados de la Asamblea proponente.

El ministro para las Relaciones con las Cortes estimó incorrecto contraponer soluciones políticas y jurídico-constitucionales, y aseguró que UCD no había contemplado la hipótesis de no llegar a un acuerdo. insistió en el deseo de negociar hasta el límite -«el espacio de la Constitución»- y negó que una mayor libertad y autonomía tuviera que estar reñida con la igualdad ante la ley de todos los españoles. Ratificó el mantenimiento de la viabilidad del dictamen previo del Tribunal Constitucional sobre los estatutos y se remitió a la Constitución en lo que se refiere a la posible integración de Navarra en Euskadi.

Restó trascendencia política a la sustitución de Miguel Herrero de Miñón y José Miguel Bravo de Laguna en la Comisión Constitucional por Francisco Fernández Ordóñez y José María Gil-Albert, y añadió que la decisión había sido tomada por el comité ejecutivo de UCD por unanimidad. No quiso informar sobre el debate previo a este acuerdo.

El señor Arias-Salgado atribuyó la ausencia de Adolfo Suárez en la Comisión Constitucional a la conveniencia de que el debate estatutario se produzca entre partidos sin inducir a confusiones con el Gobierno. Estimó que la propuesta de una comisión regia no es constitucional.