Última semana de inscripción para la Maratón Popular de Madrid
Esta es la última semana para formalizar la inscripción en la maratón popular de Madrid del 20 de mayo. El viernes, día 11, a las nueve de la noche, expira el plazo. Hoy se alcanzarán las 4.000 inscripciones y se espera que llegarán a una cifra muy aproximada a la deL pasado año, entre 7.000 y 8.000, pues es en los últimos días cuando más personas se inscriben.
Hasta la fecha el participante más joven tiene siete años y el mayor, ronda los setenta. Mujeres inscritas representan cerca del 10% y menos del 5% son los extranjeros que correrán representando a veinte nacionalidades distintas. La edad media de los participantes oscila entre los veinticinco años.Todo aquel que llegue a la meta -hay cinco horas y media de plazo- recibirá un diploma acreditativo con el tiempo realizado. Además habrá camisetas deportivas, que se entregarán junto con el diploma. Independientemente de ello, al inscribirse se regala una gorra. Aquellos que no la recibieran por apuntarse en las semanas precedentes pueden recogerla en Mapoma.
El que esta semana se cierre el plazo de inscripción, al estilo de las grandes pruebas populares que se celebran en el mundo, obedece a exigencias de una buena organización. Se hace imprescindible conocer previamente cuántos corredores participarán para saber los litros de líquido que se necesitan, así como el número de medicamentos farmacéuticos, de personal de asistencia y hasta de regalos precisos para los que lleguen. También la Mutualidad General Deportiva obliga a tener registrados de antemano los participantes para extenderles un seguro.
Esta circunstancia dejará fuera de carrera a más de uno, pues el pasado año se inscribieron 4.000 personas en los dos últimos días, muchos de ellos en la misma línea de salida y media hora antes del comienzo. Este año no ocurrirá lo mismo, pues el viernes será el último día que las inscripciones puedan hacerse en la Federación Madrileña de Atletismo, Alcántara, 60; Delegación Provincial de Deportes, Barquillo, 19; o en Mapoma, Salitre, 43. El horario es de cinco a nueve de la tarde y en Mapoma, también de diez a dos de la mañana.
Lo ideal, un reconocimiento médico previo
La mayoría de los que dentro de dos domingos vayan a recorrer las calles de Madrid ya tienen la experiencia valiosísima del pasado año o se han entrenado en éste lo suficiente como para acometer con garantías los 42,195 kilómetros del recorrido. La posibilidad de accidente en estas personas es mínima, pero no deja de ser recomendable realizar un reconocimiento médico que garantice estar en perfectas condiciones físicas de resistir el esfuerzo que se va a pedir al cuerpo. Va a resultar inevitable que haya gente decidida a salir en la maratón sin una preparación adecuada o que ésta la acelere en los pocos días que quedan para la prueba. En estos casos es imprescindible hacerse un chequeo general, sobre todo si se está por encima del peso normal, cuando hay tendencia a la presión alta o cuando hay antecedentes de enfermedades cardíacas en la familia.Hay, no obstante, una experiencia que permite evaluar el propio estado físico de cada uno. Quien ande dos o tres kilómetros sin sentir malestar o mareo y luego corra durante treinta segundos, ande después un minuto y siga sin experimentar molestias, seguramente esté bien. De cualquier manera, toda duda mínima sobre la salud debe ser solventada por un médico tras realizar un test de cansancio del corazón en ejercicio.
Si existieran problemas físicos latentes, éstos se manifestarán en forma de dolores pectorales -que salen también si se fuma en exceso, o vértigos, siempre que no se tengan dolencias para las que el ejercicio de la carrera está contraindicado y que son las enfermedades infecciosas, las renales, la cirugía reciente, las fracturas, la presión arterial alta y las anormalidades en el electrocardiograma.
De cualquier manera, todos aquellos que corran la maratón sin haber seguido un plan de preparación deben salir mentalizados para abandonar en cuanto tengan síntomas de cansancio. Es casi imposible recorrer 42,195 kilómetros sin un entrenamiento previo y en caso de llegar a la meta, el esfuerzo que se haya tenido que realizar no proporcionará beneficios al cuerpo.
Otro caso es el de los corredores que bien o por experiencia o por preparación se sepan capacitados para llegar a la meta en el tiempo que sea. Estos deben de superar el momento de máximo cansancio, que suele ser entre los treinta y los 35 kilómetros. Una vez cogido ese «segundo aliento» el movimiento de las piernas se mecaniza y se logra llegar a la meta sin dificultades.
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