Intervenciones de los líderes políticos y sindicales

En nombre de las representaciones sindicales latinoamericanas que participaron en la manifestación, Ernesto Cardenal, sacerdote y poeta nicaragüense del Frente Sandinista, tras solicitar un minuto de silencio por el joven comunista apunalado el domingo en Madrid, abrió las intervenciones finales. Hizo tres peticiones: solidaridad política para que Estados Unidos no intervenga a favor de Somoza; presión sobre el Gobierno español para que rompa las relaciones con Somoza y ayuda económica para derrotar a Somoza.Tierno Galván, alcalde de Madrid y presidente honorífico del PSOE, hizo a continuación un llamamiento a lá paz y al orden, y afirmó que «los trabajadores y los partidos de izquierda estamos demostrando que buscamos la libertad y la igualdad a través de la paz, como lo demuestra el hecho de que somos capaces de reunirnos medio milión de personas en paz y sosiego. Estamos convirtiendo Madrid en un foro público, en el que los hermanos suramericanos puedan expresar con libertad lo que les está prohibido en sus países».

Jesús Prieto, secretario general de UGT de Madrid y alcalde de Getafe, solicitó soluciones urgentes para acabar con el paro y afirmó que el Gobierno del presidente Suárez era incapaz de ofrecer la respuesta necesaria. «Si el Gobierno no nos escucha -concluyó- tendremos que ir más lejos en nuestras presiones.»

Fidel Alonso, responsable de CCOO en Madrid y concejal de este municipio, puso de manifiesto que este Primero de Mayo se repetían las reivindicaciones del pasado año. «Si no arreciamos la lucha se pueden convertir en las reivindicaciones del año que viene y con ello trasformar esta celebración en una rutina. »

Santiago Carrillo, secretario general del PCE, indicó que su partido hace suyas y defenderá en el Parlamento y en la calle, «en el marco de la Constitución», las reivindicaciones de este Primero de Mayo. «No vamos a sembrar el terror, porque nosotros somos los defensores de la libertad. Aceptamos la expresión libre de ideas de la derecha y de la izquierda, pero exigimos justicia contra los asesinos que tienen pistolas o navajas y no ideas. » Habló a favor de la unidad de la izquierda «que no es un frente popular, como afirma la derecha. Entre nosotros nadie piensa volver a los años 30, pero en la defensa de la clase obrera comunistas y socialistas siempre estarán juntos».

Felipe González, secretario general del PSOE, tras manifestar su apoyo a la lucha contra Somoza, afirmó que es hora que podamos dar a América Latina el ejemplo de nuestra democracia. Pidió a continuación que no se derrame más sangre en España, «Estamos contra los atentados contra policías y guardias civiles, tanto como contra los que se realizan contra militantes de izquierda. Queremos cambiar la sociedad con la fuerza de la razón, y no con la razón de la fuerza.» Habló finalmente de la necesidad de dar soluciones al paro y criticó a UCD. « Sin pan, la libertad importa poco.»

Marcelino Camacho, secretario general de CCOO, acusó a la CEOE de querer consolidar sus riquezas consolidando a un tiempo la pobreza de los trabajadores. «El pan y la libertad no se regalan», dijo, y es necesario reforzar las luchas para conseguir soluciones al paro y que la democracia entre en las fábricas, así como la devolución del patrimonio.

Nicolás Redondo, secretario general de UGT, cerró el turno de intervenciones arremetiendo contra el Gobierno de UCD «que está prisionero de los intereses económicos y es fiel servidor de la CEOE». Advirtió al Gobierno que en junio, en la conferencia de la Organización Internacional del Trabajo, a la que asistirá el Rey, tendrá que hacer frente a las denuncias presentadas contra él.