El dinero español paga la cantera del Borussia

Desde hace algunas temporadas, el dinero español está proporcionando a la cantera de un equipo alemán, el Borussia de Moenchengladbach, la oportunidad de potenciarse y mantener un alto índice de productividad de nuevos valores. Netzer, Stielike, Jensen -fichados por el Madrid-, Bonhoff -Valencia- y ahora Allan Simonnsen, contratado por el Barcelona, han sido los cinco jugadores procedentes del Borussia que fueron traspasados al fútbol español. Una cantidad muy superior a los cuatrocientós millones de pesetas pasó la frontera española hacia la localidad germana, cercana a Düsseldorf, que tiene unos 400.000 habitantes.

En agosto de 1974, el Madrid iniciaba la «era Borussia». El club blanco contrató por tres temporadas a la máxima figura del fútbol alemán, tras el «kaiser» Beckenbauer, el rubio centrocampista Gunther Netzer. En la operación, al margen de connotaciones particulares por la pequena guerra declarada a Manuel Velázquez, existieron entonces deseos no ocultados de devolver al club madridista parte de su esplendor, perdido ya en Europa. Los primeros millones españoles -pueden calcularse en más de setenta- ingresaban en las arcas del ya pujante equipo de Moenchengladbach.Tres temporadas permaneció Netzer en el Madrid y, posteriormente, el club de Chamartín se hizo con los servicios de otro «borusser», Henning Jensen, si bien éste de nacionalidad danesa. Jensen cumple precisamente sus tres años de contrato al finalizar esta temporada y no renovará. Hace dos temporadas, otro nuevo jugador alemán del mismo equipo, Stielike, recalaba también en las filas blancas y aún le queda otro año de contrato. Hay que seguir sumando millones. Ambas operaciones estuvieron por encima de los cincuenta, cada una de ellas. Al hablar de estas cantidades se reflejan solamente lo que costó el traspaso de club a club. Lógicamente, existen luego otro tipo de gastos derivados de los pagos a los jugadores. Stielike, por ejemplo, tiene un contrato anual que supera los nueve millones de pesetas. El Valencia, por su parte, contrató la temporada anterior a otro hombre del Borussia, Rainer Bonhof, operación que superó asimismo los setenta millones de pesetas. Por último, aún está reciente esta semana el fichaje en firme, por parte del Barcelona, de Allan Simonnsen -danés, como Jensen-, operación que en principio costará bastantes más millones de los 69 iniciales que el club azulgrana abonará al alemán, una vez realizada la transferencia de pesetas a marcos. El danés cobrará, además, doce millones por cada una de las tres temporadas.

Moenchengladbach se ha constituido en ejemplo del poderío futbolístico alemán. Másde cuatro millones de fichas hablan elocuentemente de la mentalidad con la que se trabaja en el país germano. Para el madridista Stielike hay varias circunstancias que explican este auge: «Weisweiller ha sido el principal artífice del Borussia. Estuvo once años trabajando principalmente con los jóvenes. Esta es una cualidad que se da en casi todos los; clubs alemanes. Allí se empieza a jugar a los siete y ocho años, y siempre con monitores físicos y preparadores técnicos, casi siempre, o en gran número al menos, ex futbolistas. Además se deja trabajar con tranquilidad. No se exigen títulos, ni siquiera la afición, al menos hasta comprender que se ha tenido tiempo para desarrollar el trabajo previsto.»

Jensen y Simonnsen, sin embargo, proceden del fútbol danés, pero esto también encuentra explicación. Jensen llegó al Borussia en 1972, y Simonnsen, un año más tarde. El futbolista danés, auténtico aficionado, suele recalar desde muy joven en el alemán. No cuesta dinero y la inversión -estos son dos casos evidentes- resulta un éxito claro. «Prácticamente son como de la cantera», asegura Stielike.

Los números no engañan. Hace unas quince temporadas, el Borussia ascendió a Primera División. El paciente trabajo de Weisweiller -ha renovado ahora por el Colonia- dio más adelante sus frutos: cinco títulos de Liga, uno de Copa, una copa de la UEFA y finalista en más de una ocasión de la Recopa. Ultimamente atraviesa la lógica crisis del equipo que se ha desprendido de sus mejores jugadores. No ha fichado a otros craks. Lo invierten en la cantera. El que fuera extremo de la selección alemana, Heynckes, será el nuevo entrenador.