_
_
_
_
_

Dos policías heridos en un atentado contra el consulado francés de San Sebastián

Los dos policías nacionales que habitualmente se encargan de vigilar el edificio que el consulado francés tiene en la capital donostiarra resultaron heridos de gravedad en la madrugada de ayer al ser alcanzados por la metralla que contenía un artefacto explosivo de mediana potencia colocado en el segundo piso de la Maison de France.Este nuevo acto de violencia se produjo horas antes de que la justicia francesa considerase improcedente la petición de extradición formulada por el Gobierno español al francés, de los refugiados vascos Mikel Hoicoechea y Martín Apaolaza. En el espacio de tiempo transcurrido desde que se hizo pública la intención del Gobierno español de solicitar la extradición y la del francés de denegarla, varias instituciones del país galo han sido atacadas directamente por la organización terrorista ETA.

A las 2,50 horas de la madrugada, gran parte de la población donostiarra -incluso aquellos que viven en barrios alejados- pudieron escuchar el fuerte estruendo del artefacto, que destruyó una pared de tina de las aulas (el edificio también alberga al instituto francés), hizo tambalearse diversos tabiques y causó daños de consideración en varias dependencias del consulado.

Los conserjes del edificio, sobresaltados, bajaron desde sus viviendas hasta la estancia donde se produjo la explosión y atendieron en un principio a los policías heridos, optando rápidamente, ante la gravedad de las lesiones, por avisar a una ambulancia.

Jacinto Garrido Pleuezuelo y Ramón García Resel fueron trasladados a la residencia sanitaria Nuestra Señora de Aránzazu. El primero de ellos resultó herido en las piernas y el segundo, que fue intervenido quirúrgicamente, presentaba lesiones, también de carácter grave, en los ojos, manos, tórax y vientre.

Tras las primeras investigaciones, la policía ha señalado que el artefacto, conectado a un sistema de relojería y compuesto por unos dos kilos de explosivos -posiblemente goma-2-, adosados a metralla, podría haber sido colocado al finalizar la conferencia sobre arte que se celebró el jueves, a las siete de la tarde, en el salón de actos del consulado, cuando los dos policías que vigilaban el edificio se encontraban en la puerta principal.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_