Victoria de la izquierda francesa en las elecciones cantonales
Un año después de su derrota en las elecciones legislativas, la izquierda francesa ha ganado las cantonales, de igual manera que ganó las municipales un año antes del fracaso del «Programa común» en marzo de 1978.El Partido Socialista, una vez más, se ha revelado como el motor del avance de la izquierda y se consolida como el primer partido de Francia. Según los resultados oficiales, de los 1.847 cantones que se renovaban en estos comicios cantonales (cada tres años se vota para elegir la mitad de los cantones de todo el país), la izquierda consiguió 930 y la mayoría gobernante 9 17. A partir de estas cifras globales, se observa que, en la oposición, los comunistas ganaron 41 consejeros generales y los socialistas 156. Por el contrario, de los dos grandes partidos de la derecha, los gaullistas perdieron 52 y los giscardianos cincuenta.
A la vista de análisis más minuciosos, que tienen en cuenta los porcentajes de votos, así como el valor de estos últimos en relación con los resultados de elecciones anteriores del mismo género y en las mismas regiones, el Partido Socialista por la oposición y el giscardiano, UDF, por la mayoría, parecen configurarse como las dos formaciones que ganan terreno.
El resultado de las elecciones cantonales tiene gran importancia a nivel de Administración local y, contrariamente, el apoliticismo que, según los especialistas, las ha caracterizado hasta el presente, han interesado a los franceses (el 35% de abstención no se considera excesivo para este tipo de elecciones) y la división entre la derecha y la izquierda parece ser que ha juzgado de forma fundamental.
En base a lo anterior, todos los especialistas constataban ayer un hecho claro, que ya se ha evidenciado en otras ocasiones: a pesar dilas divisiones, de los partidos de izquierdas, el electorado continúa fiel a la dinámica unitaria de los años que precedieron al fracaso dilas legislativas de marzo de 1978. En este sentido, «cabe pensar que las direcciones de comunistas y socialistas sabrán sacar las lecciones oportunas».
Por lo que se refiere al PS, su espectacular victoria también pudiera incidir en el desarrollo del congreso nacional del partido, que se celebrará en Metz a finales de la semana próxima. Sobre el actual primer secretario, François Mitterrand, responsable oficial de esta victoria, hay que preguntarse si, al ganar las cantonales, no ha ganado ya el congreso y la candidatura a la presidencia de la República para 1981, frente a su enemigo, Michel Rocard.
Como se viene observando ya desde hace varios años, en todas estas elecciones, no decisivas a nivel de Gobierno nacional, pero sí en el plano de la Administración local, el avance de la izquierda es continuo.
