Incertidumbre sobre la postura de Irán en la próxima conferencia de la OPEP

La posibilidad de que se rompan la unidad y la disciplina en el seno de la Organización de Países Productores y Exportadores de Petróleo (OPEP), en la reunión que tiene previsto iniciar el próximo lunes en Ginebra, fue adelantada ayer en medios próximos a la citada organización en la capital austríaca. Frente a estos pronósticos, los expertos petroleros estiman como muy probable un incremento de los precios de los crudos de hasta diecinueve dólares el barril, es decir, lo que ya aplica Irán a sus exportacionesdesde que reanudara el suministro tras la subida al poder del ayatollah Jomeini.

La mayor parte de los países productores han aplicado ya importantes aumentos de precios en las últimas semanas, rebasando ampliamente los niveles acordados en la reunión de Qatar, celebrada el pasado mes de diciembre. La interrupción del suministro de Irán durante los dos últimos meses de Gobierno del Sha y los incrementos de producción necesaria para garantizar el suministro a Occidente han sido los pretextos aducidos por los países. productores para elevar sustancialmente los precios de los contratos en negociación. Por otra parte, el mercado spot (entrega inmediata) ha alcanzado cotizaciones astronómicas, derivadas sobre todo de una psicosis de desabastecimiento.En vísperas de la conferencia de Ginebra, la mayor parte de los países occidentales tienen preparadas medidas de emergencia encaminadas a reducir drásticamente el consumo interior, para el caso de que los precios se multipliquen o que los países de la OPEP decidan restringir sus producciones y, por tanto, el nivel de suministro a los países importadores.

Los dirigentes de los trece países de la OPEP han insistido en vísperas de la reunión en que la convocatoria de Ginebra tiene un exclusivo carácter consultivo y que no es probable que se adopte resolución alguna con carácter Firme, al menos en lo que se refiere a los precios. Por el contrario, medios próximos a la OPEP han sugerido la posibilidad de que las decisiones se centren más en una reducción de suministros o incluso en una sustitución progresiva del dólar como divisa en los intercambios petroleros internacionales.

El cambio de la situación política iraní, que dista mucho de ser estable en estos momentos, es uno de los factores que más preocupa a los países occidentales y constituye, de hecho, una de las incógnitas clave de la reunión. Hasta ahora, las presiones de los países duros de la organización -Argelia, Irak y Libia- habían sido contrarrestadas por los blandos -Arabla Saudita, los Emiratos e Irán-, pero los planteamientos del Gobierno islámico de Jomeini hacen prever un cambio radical de postura en el seno de la Organización. Por el contrario, se confía en una ralentización de las aspiraciones de Venezuela, cuyo Gobierno recién estrenado pudiera atemperar las posturas sustentadas en Qatar por el representante de Carlos Andrés Pérez, en plena campaña de elecciones presidenciales.

La situación en los mercados petroleros ha sido, sobre todo, aprovechada por los grandes especuladores. Algunos de los países productores sustentan la creencia de que entre ellos se encuentran en lugar destacado las grandes compañías multinacionales, a las que han llegado a amenazar con un boicot en toda regla, caso de persistir su actitud.

Los países productores no integrados en la OPEP -México y la Unión Soviética, por ejemplotambién han aprovechado para elevar consid erabl e mente sus precios, al tiempo que resistían -en el caso de México- las presiones occidentales para incrementar sus suministros. Recientemente varios países europeos, entre ellos España y Francia, han suscrito contratos adicionales con el consorcio petrolero mexicano (Pemex), con vistas a garantizar el suministro, ante una eventual reíteración de la inestabilidad en el golfo Pérsico.

Al parecer, los paises productores podrían examinar también en Ginebra las recientes manifestaciones de la Agencia Internacional de la Energía, en el sentido de reducir en un 5% el consumo global de petróleo de los países occidentales.