El domingo se desveda la trucha

El domingo se desveda la trucha. Serán unos 800.000 pescadores los que se repartirán por los 75.000 kilómetros de riberas pescables en pos de las primeras truchas, que en número aproximado de quince millones se capturarán durante la temporada, que transcurrirá hasta el 31 de agosto. El régimen legal de pesca que tendrá esta especie será de veinte capturas por día y pescador, con una dimensión mínima de diecinueve centímetros.La campaña truchera de este año se presenta bajo una tónica similar a la pasada, que no resultó de ninguna manera excepcional. Falta nieve en las montañas y, aunque lleguen con retraso, no podrán ya formar una base sólida de hielo, que habría mantenido más tiempo la nieve, demorando el deshielo y retrasando, por tanto, el estiaje.

Las repoblaciones han abundado por esta causa. Han sido cerca de nueve millones las truchas comunes con que se han repoblado los ríos y cerca de cuatro con las de la especie arco-iris, tanto en tramos libres como en cotos, para tratar de mantener en las aguas una densidad de población que satisfaga las apetencias del pescador. En general, para realizar las repoblaciones de salmónidos se han utilizado unas determinadas tablas que indican el número máximo de truchas que es aconsejable soltar por kilómetro de río, según la calidad de las aguas y su riqueza alimenticia, teniendo en cuenta siempre la anchura media del río y el tamaño de los ejemplares que se sueltan.

Las provincias que son capaces de dar más de un millón de truchas por temporada son: Lugo, León, Lérida, Santander y Asturias. El polo opuesto lo forman Valladolid, Ciudad Real, Alicante, Córdoba, Huelva y Canarias, que en sus extensiones provinciales no cuentan apenas con tramos trucheros.

Precisamente contra esto, y para satisfacer la demanda de los pescadores, en los últimos años comenzaron a implantarse en determinados tramos de ríos los cotos de pesca intensiva, en los que el período hábil no suele contar. En ellos se realizan repoblaciones artificiales de trucha, arco-iris generalmente, semanal mente y con ejemplares de tamaño legal. Los tramos que se, utilizan para la implantación de estos cotos no tienen que ser necesariamente de calidad, ya que el tiempo que permanecen las truchas en este medio es relativamente corto; lo importante es mantener una población relativamente densa para que las capturas sean frecuentes. En estos cotos es muy fácil pescar -resulta ideal por ello para los principiantes-, pero ni la calidad de las capturas ni la deportividad del lance tiene comparación con la pesca que pueda realizarse de la trucha común -más astuta y de carne más sabrosa- en aguas libres.

En estos primeros días de la campaña el cebo más recomendable es la lombriz, generalmente porque las aguas o están tomadas o bajan fuertes, arrastrando insectos, por lo que la trucha se ceba con ellos. La cucharilla, en las primeras luces del día, da resultados óptimos si las condiciones de las aguas permiten su uso, mientras que la mosca también puede ser un cebo adecuado, siempre en momentos muy determinados y de acuerdo con la clase de mosquito que sobrevuele el río.

Esta temporada la trucha estrena nueva época de pesca. En años anteriores se desvedaba el primer domingo de marzo y la campaña transcurría hasta el 15 de agosto. En aguas de alta montaña el período legal de pesca iba del 16 de mayo al 30 de septiembre. Este año la disposición aprobada permite la pesca de la trucha desde el tercer domingo de marzo hasta el 31 de agosto, ambas fechas ínclusive y sin hacer distinción de aguas de alta montaña.

El domingo también se desveda el salmón en Asturias. Las perspectivas son optimistas en la región, no así en otras provincias, en las que se llevan contabilizadas escasas capturas en las dos semanas que se llevan ya de pesca.