¿Ignorantes o ignorados?

Considero deplorable su editorial del día 1 de marzo: un buen número de ciudadanos, entre los que me encuentro, decidimos no votar, sin por ello perder nuestra condición de tales, como usted tan alegremente afirma.No me considero sabio, pero no soy tan ignorante como para proclamar la ignorancia de los demás ocultando la propia.

La ignorancia o el conocimiento no dependen de un voto, sino de una actitud meditada y consciente.

No es ignorante ni irresponsable el que se opone a una sociedad que no le gusta, a un sistema falso, a una mascarada política. Es sencillamente un amante de la libertad que no tiene que ceñirse a los estrechos límites impuestos por ustedes con su Constitución, sus partidos, sus elecciones, sus gobiernos y su democracia.

Quizá algún día aprendan señores demócratas, que hay alguna gente, utópicos, locos o ignorantes, es igual el nombre, que no aceptan su sistema, que están má allá de sus fantasmadas electorales sin ser por ello unos abúlicos, unos ignorantes o unos ciegos.