Una niña gitana de once años, muerta por asfixia
Una niña gitana de once años de edad, Concepción Remedios Jiménez, apareció muerta el sábado en casa de una hermana, asfixiada por medio de papeles que le introdujeron en la boca, y con signos externos de haber sufrido un intento de violación. El hecho ocurrió en el número 12 de la calle de Luis Jimeno, en el barrio de Entrevías, y la denuncia no se presentó en la comisaría del distrito hasta cuatro horas más tarde.La policía pudo constatar que el cuerpo de la niña había sido movido por sus familiares, por lo que se habían borrado huellas de interés.
La niña Concepción Jiménez recibió el encargo de su abuela, paralítica, de ir a buscar un cubo de agua a una fuente de las inmediaciones. Ya no se la volvió a ver viva. Después de transcurridas unas horas, los familiares se alarmaron y comenzaron a. buscar a la niña por las casas de los vecinos o familiares cercanos.
Una de sus hermanas se dirigió a su propio domicilio, situado en la misma calle de Luis Jimeno, y allí encontró el cuerpo de la víctima. Estaba echada en la cama, boca abajo. Serían las cuatro y media de la tarde, aunque el crimen no lo denunciaron hasta las 830, no se sabe muy bien por qué motivos.
La autopsia demostró que la niña murió por el cúmulo de papeles que le habían introducido en la boca, y que le llegaban hasta la tráquea. El cuerpo tenía el vestido subido hasta el pecho y las medias bajadas, por lo que la policía estima que hubo intento de violación, y que los papeles podrían haber cumplido la función de mordaza.
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