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El presidente de Iberia reclama aumentos de tarifas en vuelos interiores

La compañía Iberia cerró el último ejercicio 1977-78 (cierre a 31 de octubre) con un beneficio de 792 millones de pesetas y una cifra de facturación de 81.598 millones de pesetas, según se puso de relieve en la junta general ordinaria de la sociedad celebrada ayer en la sede del INI, socio mayoritario de la sociedad, ya que controla el 97% de sus acciones.Como datos destacados del pasado ejercicio, cabe destacar los siguientes:

- Proceso de saneamiento de la estructura de capital de la sociedad al que se ha procedido con una ampliación de capital de 10.000 millones de pesetas, un 60% a cargo de la cuenta de regulación. Iberia cuenta hoy con 15.000 millones de pesetas de capital y 1.513 de reservas. Para próximos ejercicios se pretende ampliar el capital a 25.000 millones, parte con desembolsos de los socios y parte a cargo de la cuenta de regulación que aparecerá en cuanto se haga una valoración real de flota y créditos. Los fondos propios representan el 31 % de los totales, con sensible mejora sobre años anteriores. El beneficio de 791 millones se distribuye de forma que 560 cubren déficits acumulados, 191 se dedican a dividendos (3 %) y 31 millones a reservas.

- Renovación en la presidencia de la compañía producida en el momento de cerrar el pasado ejercicio, al ser nombrado el anterior presidente, Manuel de Prado, para un nuevo cargo público. Le sustituyó el anterior subsecretario de Aviación Civil, Enrique de Guzmán.

- Dificultades en la rentabilidad de la actividad de Iberia en el interior del país, por la política de congelación de tarifas seguida por el Gobierno. Las tarifas, según manifestó el presidente, están congeladas desde 1977, y la petición de aumento está autorizada por la Junta de Precios en una cuantía del 9,3%, desde hace cinco meses, sin que haya sido aprobada por el Gobierno. Iberia pedirá el próximo mes de junio un nuevo aumento acumulativo al anterior del orden del 16%. En este tema el presidente de la sociedad, en su informe y en una rueda de prensa mantenida antes de la Junta, señaló que las tarifas aéreas en España son más baratas que en otros países y en otros medios alternativos de transporte (tren), con lo que se provoca una demanda artificial en los aviones que dificulta el servicio e incluso la rentabilidad. Los beneficios de Iberia, dijo el señor Guzmán, se hacen con los tráficos internacionales, que compensan algunas pérdidas de los tráficos peninsulares y las importantes que se producen en los interinsulares (Canarias).

- Destacó también el señor Guzmán como tema de preocupación la situación de desrregulación o liberalización de las tarifas aéreas internacionales por la actitud de las autoridades americanas que han provocado la práctica ruptura de la IATA. La liberalización de tarifas forzará mayores niveles de competencia y descenso de precios y de ingresos para las compañías.

Defendió la necesidad de establecer un contrato-programa con el Estado por parte de la compañía, con objeto de fijar prioridades, servicios públicos subvencionados o no y criterios de actuación. Este contrato, dijo, debe estar acorde con un Plan Nacional de Transportes.

Como problemas inmediatos, señaló el presidente de Iberia el de la falta de tripulaciones, que fuerza a recurrir a aeronaves de fuselaje ancho con mayor capacidad de pasaje, o a limitar la expansión. En estos momentos, Iberia dispone de una flota de noventa aeronaves (34, DC9; 32 Boeing 727; 6 DC 10; 6 DC8, 3 Boeing 747 y 9 Focker). En cuanto a renovación de flota están contratados cuatro Airbús, más otras cuatro opciones, y hay suscritas opciones con las firmas americanas Boeing y Douglas (DC).

Vuelos regionales de tercer nivel

En el área del tercer nivel -vuelos regionales- aún no desarrollada en España y sobre la que existen algunas iniciativas regionales, el presidente de Iberia señaló que la compañía tiene elaborados estudios sobre el tema.

En la última parte del discurso del presidente de Iberia a la junta general se refirió a la conflictividad laboral de los últimos tiempos y a la negociación de los convenios. Entre otras cosas dijo «en una empresa como Iberia, donde los niveles retributivos son relativamente altos, con los de otros sectores laborales del país, en la que se da la seguridad en el empleo, la expansión y la creación de nuevos puestos de trabajo, estimo que existen motivos de satisfacción para todos los que trabajan en ella y debemos esforzarnos por asegurar su desarrollo ordenado sin riesgos para su rentabilidad y ulterior desarrollo». En términos similares se pronunció el vicepresidente del INI, presente en la junta, en representación del 97% de las acciones.

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