La policía impide la celebración de una asamblea en Orcasitas

Unas 3.000 personas, residentes en el poblado madrileño de Orcasitas, fueron desalojadas el jueves por la noche de la iglesia del barrio y de sus proximidades, donde se habían reunido en asamblea para tratar las repercusiones del nuevo decreto sobre viviendas de protección oficial. Según informaciones de alguno de los asistentes, la asamblea había sido precedida por una reunión de la Asociación de Vecinos Guetaria, titular del poblado de Orcasitas, con el delegado provincial de la Vivienda, Luis Laorden.En palabras de Eduardo Hernández, arquitecto de la barriada, «en la reunión con el delegado provincial se trataron dos puntos: el económico y las consecuencias del nuevo decreto. Para empezar, esta disposición implica que desaparecen acuerdos anteriores entre el Ministerio y el poblado, algunos de ellos firmados por el propio ministro actual».

Superfie y pago

Entre los aspectos directamente afectados destacan «la promoción, el tamaño de las viviendas, su precio y las condiciones de pago. En resumen, puede decirse que, respecto a lo que se acordó en su día, habría que reducir la superficie de las viviendas en un tercio y pagar por ellas una cantidad cuatro o cinco veces mayor que la pactada. Se da la circunstancia de que el asunto de la superficie lo habíamos acordado cuando ya desempeñaba su cargo Garrigues Walker». Sobre una supuesta contradicción entre el decreto y los acuerdos anteriores suscritos por la barriada con el Ministerio, el arquitecto asegura que «tenemos firmas del actual ministro bajo órdenes o compromisos plenamente distintos de lo que se estipula en el decreto».Los desajustes que aparentemente ocasionaba el decreto en las actuales estructura y régimen de viviendas en Orcasitas motivó primero la reunión de la asociación de vecinos con el delegado provincial de la Vivienda y, posteriormente, la convocatoria de los residentes en la Iglesia y sus alrededores. «Este tipo de reuniones es habitual en el poblado: cuando el número de personas es muy elevado, los asistentes que no encuentran espacio en el interior se reúnen en las proximidades y siguen los asuntos con ayuda de una instalación de altavoces. Calculo que habría unas 3.000 personas. Sobre las 9.30, inesperadamente, apareció la fuerza pública, pidió que se suspendiera la asamblea y efectuó unas cargas ligeras contra los que se encontraban en el exterior. No se tienen noticias de que se produjeran heridos, pero la intervención ha parecido totalmente inexplicable a los vecinos.»

Se estima que en Orcasitas residen unas 13.000 personas.