Martín Villa y Múgica se enfrentaron en un debate sobre el terrorismo
La posible anticonstitucional del decreto-ley sobre medidas para la seguridad ciudadana fue el tema que se afrontó con mayor amplitud y que suscitó más controversias en el debate que anoche transmitió TVE en directo, por la primera cadena, y en el que participaron el ministro del Interior, Rodolfo Martín Villa; Enrique Múgica, de la ejecutiva del PSOE; José María Stampa, catedrático de Derecho penal, y Luis María Ansón, presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid. Actuó como moderador Manuel Martín Ferrand.
El debate sobre el decreto sugirió al señor Stampa una alusión al editorial que sobre el tema publicó EL PAIS el pasado sábado, alusión que concretó el señor Martín Ferrand. En síntesis, el señor Stampa afirmó que no le satisfacía por su sistemática, pero que en conjunto le parecía convincente y que, aunque pudiese rozar algún defecto de forma respecto a las previsiones constitucionales, entendía que el decreto era necesario.El ministro del Interior aseguró que esas normas tratan de «dar respuesta a planteamientos serios», y después de defender el conjunto de la legislación penal española sobre el terrorismo criticó la normativa procesal que impide a los jueces la necesaria celeridad.
El señor Múgica replicó que estas normas le parecían una muestra de «agresividad electoral» del Gobierno, y defendió la anticonstitucionalidad del decreto.
El señor Ansón dijo en otro momento que «la dictadura del miedo atenaza a las provincias vascas» y que desde el campo periodístico se debiera llegar a un compromiso entre los directores de los medios informativos para acordar un tratamiento adecuado del fenómeno terrorista.
El señor Múgica dijo que era contrario a la censura de prensa, y por ello le parecía innecesario el compromiso entre los directores. El ministro se mostró contrarío a ningún tipo de depuración en el aparato del Estado; «además -dijo- yo no sería el adecuado para hacerlo». El señor Múgica replicó que no es necesario depurar a nadie, pero que no se puede conservar en sus puestos a mandos que no se distinguen por su simpatía hacia la democracia.
El ministro del Interior contestó que si se refería en concreto al comisario Conesa, podía asegurarle que «mientras siga siendo eficaz Conesa y yo siga siendo ministro, Conesa seguirá en su puesto». «Yo dudo -resplicó el señor Múgica- que sea eficaz y dudo de su imagen democrática.» «En todo caso -trató de interrumpir el señor Martín Villa- esta cuestión es competencia del ministro del Interior, que ahora soy yo.»
