La disciplina policial

«Aun con las dificultades obvias para mantener la serenidad de juicio cuando está todavía caliente la sangre de seis nuevas víctimas del terror en poco más de veinticuatro horas, quisiéramos decir unas pocas palabras en torno a la remodelación de los órganos administrativos que tiene a su cargo el orden público.En el último Consejo de Ministros -adelantado precisamente para tratar de neutralizar en lo posible un plante protagonizado por destacados mandos de la Policía Nacional- se ha creado la Secretaría de Estado para el Orden Público. No se ha desarrollado todavía la estructura de este nuevo organigrama, pero todo permite suponer que las modificaciones no serán espectaculares, aunque tampoco sereducirán a un mero cambio de nombre y de rango de la Dirección General de Seguridad.

No podemos ocultar un cierto escepticismo a propósito de los resultados inmediatos que vayan a obtener gracias a estas medidas del Gobierno. Mas, a pesar de ello, saludamos este nuevo esfuerzo en pro de la eficacia con simpatía y esperanza, porque cualquier idea que tenga posibilidades de mejorar la grave situación por la que atravesamos merece el apoyo ciudadano a priori. Una garantía, de todos modos, la ofrece el nombramiento del general Timón de Lara, cuya entrega en estos momentos al servicio del país es digna de reconocimiento.

Y si bien no nos cansamos de reiterar al Gobierno la exigencia de que consiga resultados eficaces a corto plazo, a plazo inmediato, porque de otro modo toda la democracia naciente corre el riesgo de convertirse en cenizas, también añadimos ahora que daríamos por muy bien empleados los esfuerzos reorganizativos si lograse restablecer la moral, la disciplina y la obediencia entre la totalidad de los mandos intermedios policiales, muy quebrantadas y necesitadas de medidas inmediatas y enérgicas. La eficacia en la lucha contra el terrorismo sería una consecuencia. Pero todo ha de hacerse a la mayor velocidad posible, porque ya no queda apenas tiempo de restablecer la fe en las libertades, que pasa por su defensa eficaz a cargo de una policía estrictamente profesional.»

, 14 enero