El Sporting de Gijón, a un punto del líder

El Spórting de Gijón, con su fácil triunfo ante el Huelva, se ha colocado en la clasificación a un solo punto de¡ líder, el Real Madrid. El resto de los equipos con posibilidades de aspiraciones al título de campeón salieron derrotados: el Barcelona, en Atocha; el Valencia, en el Sardinero; el Athlétic de Bilbao, en Sarriá, y Las Palmas, en Zaragoza. El Sevilla venció con dificultades al Salamanca, y el Hércules al Celta, en sus respectivos campos.

El Gijón se acerca al MadridLos gijonenses apenas tuvieron dificultades para imponerse fácilmente a un ingenuo Huelva. A los seis minutos ya se adelantó el Spórting, lo que le proporcionó confianza y le sirvió para realizar el juego necesario con el fin de asegurarse él triunfo. Al Spórting le bastó el primer tiempo para demostrar su superioridad y que el triunfo no se le podía escapar, como así sucedió.

López Ufarte derrotó al Barcelona

El Barcelona jugó sin delantera, disminuida aún más con la expulsión de Heredia antes de que finalizara el primer tiempo, a los 37 minutos. Los donostiarras impusieron su dominio y su acierto, sobre todo en el lanzamiento de faltas. Fruto de dos de ellas fueron los goles del triunfo vasco, obra de López Ufarte. La posición de uno y otro equipo era clara y favorecedora para los donostiarras, cuya defensa apenas contó con trabajo al carecer los azulgranas de hombres en punta. La Real Sociedad, por tanto, le bastó con afianzar su centro del campo, trampa en la que cayeron los azulgranas, aunque quizás no tenían otra cosa que hacer. El encuentro no brilló por su calidad.

El Valencia, humillado en Santander

El Valencia pagó demasiado cara su desmesurada confianza al creer que obtendría algún positivo en El Sardinero. El Santander, a base de coraje, entrega y fuerza, superó y sorprendió en todo momento a un Valencia lleno de figuras, pero convertidas en sombras de sus mismos nombres. Diarte se enfadó por su sustitución y si no juega quiere ser traspasado. La velocidad de los santanderinos fue decisiva. Se adelantaron en el marcador y con un solitario tanto finalizó la primera parte. Al poco tiempo de iniciarse la segunda parte el Santander aumenta su cuenta. Fue entonces cuando el Valencia jugó sus últimas cartas y adelantó sus líneas. Acortó distancias Y creó las suficientes ocasiones como para igualar y desnivelar el marcador. Pero el tanto se inclinaría a favor de los santanderinos, que sentenciaron el partido en el último minuto.

Difícil triunfo del Sevilla

Sevillistas y salmantinos realizaron un mal partido, debido, principalmente, al mal estado del terreno de juego y también a las tácticas de ambos conjuntos. El Sevilla se impuso a base de tesón y fuerza, contrarrestado por un Salamanca dedicado exclusivamente a una defensa a ultranza. De todos modos, el Sevilla finalizó el primer tiempo con ventaja de un gol. Los salmantinos consiguieron empatar y el defensa Gallego obtener el triunfo. El Salamanca fue un equipo correoso, muy dificil de superar por un Sevilla fallón e inseguro.

El Hércules se impuso al Celta

El Celta jugó un buen partido, pero en el centro del campo. Apenas creó peligro delante de la portería de Amador. El Hércules, por su parte, intensificó su dominio. Su efectividad fue mayor que la de los célticos y fruto de ello fue el triunfo. El victoria del equipo alicantino no llegó hasta la segunda parte, cuando algunos fallos de la defensa del Celta propiciaron los goles de Kustudic y Abad.

Buen triunfo del Zaragoza

El Zaragoza venció brillantemente al conjunto canario, del que se esperaba más. Su triunfo fue justo. Los zaragocistas se impusieron en todo momento a los jugadores de Miguel Muñoz. La iniciativa fue totalmente del Zaragoza, que además contó con gran acierto a la hora del remate.

El Español qanó de penalti

El Español y el Athlétic de Bilbao disputaron un partido mediocre, televisado, en el que el triunfo se inclinó por parte del primero al transformar un penalti por obra de Marañón. Las mejores ocasiones de gol, de las pocas que hubo a lo largo del encuentro, correspondieron al Español. Los bilbaínos defraudaron porque se esperaba más de ellos. No jugaron a gusto, a su estilo, debido a los marcajes de sus contrarios.