Un muerto y treinta heridos en accidente ferroviario en Huesca

Una persona ha resultado muerta y otras treinta heridas en el accidente registrado en la mañana de ayer en la línea férrea Zaragoza-Canfranc. Otros accidentes ocurridos con anterioridad en este tramo no produjeron víctimas, si bien han servido para poner de manifiesto el mal estado en que se encuentra la línea, no sólo en cuanto a material e instalaciones, sino también por lo que se refiere al propio trazado, uno de los más sinuosos y complejos de toda la red española.

El accidente de ayer se produjo en el kilómetro 42,200, cerca del apeadero de Almudévar, en el llamado desierto de La Violada, al sur de la provincia de Huesca.El tren ferrobús Canfranc-Zaragoza, que había salido poco después de las siete de la mañana de la estación pirenaica, colisionó con un convoy de mercancías de 34 vagones que circulaba en dirección contraria. Según algunos de los viajeros el choque produjo una fuerte estampida. Como consecuencia del suceso resultó muerto en el acto el maquinista del ferrobús, José María Laguna, de 45 años de edad, casado, y cuyo principal cometido en la empresa Renfe lo venía desempeñando habitualmente en el centro de control y maniobras de Las Delicias, en el nudo ferroviario de Zaragoza.

Inmediatamente después de producido el accidente, servicios asistenciales de la Cruz Roja con base en Almudévar, miembros de la Guardia Civil y ambulancias acudieron al lugar del suceso. Los heridos -ocho de ellos en estado grave- fueron trasladados a las residencias de la Seguridad Social de Huesca y de Zaragoza, desde donde algunos de ellos serían transportados después hasta los respectivos hospitales militares, ya que veintiuno de los heridos son soldados de la Escuela Militar de Alta Montaña de Jaca (Huesca), de donde habían salido ayer por la mañana con permiso especial de fin de año.

Horas después de que se produjera el accidente, el gabinete de información de Renfe, en una nota oficial, daba a entender que la colisión de los trenes se produjo debido a que el maquinista del ferrobús, que resultó muerto, había ignorado la señal roja que, junto al apeadero de Almudévar, indicaba que la vía estaba ocupada por otro convoy.

Durante el año 1978 han sido varios los accidentes leves en esta línea férrea, que está siendo objeto estos días de una polémica de carácter político. La Diputación General de Aragón y algunas entidades financieras han manifestado en repetidas, ocasiones su interés por que se vuelva a abrir el enlace ferroviario entre la estación de Canfranc y la línea del sur de Francia, por medio del túnel internacional de Aragnouet.

Cinco accidentes con víctimas en tres meses

El comité de empresa de Renfe difundió ayer tarde un comunicado en el que recuerda que, ante la sucesión de accidentes ferroviarios en los últimos tiempos, el pasado día 19 había advertido que éstos se seguirían produciendo, «ya que no responden a una casualidad, sino a una serie de deficiencias estructurales». El comité de empresa advierte al Gobierno de la gravedad de esta situación, como lo demuestran los cinco accidentes con víctimas registrados en los tres últimos meses.