300 millones

Que las 625 líneas son fiel espejo de la política de la dirección y que los criterios de José Antonio Plaza coinciden con los de Miguel Martín, director de TVE, es algo incuestionable incluso a la hora de justificar la censura en el medio. Si la programación de TVE para la nueva época que se inicia con el referéndum es la que promociona 625 líneas, entonces hay que perder las esperanzas de que algo cambie, a corto plazo, en el telefundio de Prado del Rey, a raíz de este acontecimiento histórico. Los trabajadores y «profesionales » seguirán luchando por una RTVE «de todos y para todos». José María Iñigo volverá a entrevistar a el Cid Campeador para obtener la gratificante respuesta de que al legendario batallador, hoy, le gustaría ser o futbolista o José María Iñigo en persona. Y el Consejo Rector no acabará de reunirse a la búsqueda de un estatuto que finalmente «desestabilice» a los actuales directivos.Mientras RNE adapta su programación a los días que vivimos, TVE da la espalda al futuro y dirige sus cámaras hacia las dictaduras de Pinochet y Videla. Un desgraciado y deliberado homenaje al pasado que dejaremos atrás. La triste noche del sábado, con la retransmisión del Festival de la OTI desde Santiago de Chile, fue intencionadamente redondeada con la retransmisión el domingo del programa 300 millones desde Buenos Aires.

El presentador argentino, perfecto duplicado del general Videla, cantó las gestas y los gloriosos efectos del golpe con una prosa que durante muchos años nos ha sido familiar: «Argentina, tierra de promisión. Dios también se detuvo aquí. Compartir la paz del trabajo realizado. El eco del alma liberada. Un puente hacia otras tierras hermanas. La absoluta seguridad y tranquilidad para el que vive la noche porteña.»

El locutor del Canal 11, videlista hasta en la fisonomía, prosiguió por el terreno cultural -«conciertos y ballets del más alto nivel cultural; las librerías con sus puertas abiertas de par en par las veinticuatro horas del día»-, para concluir el recorrido turístico con una irreverente advocación: «Quien haya visitado estos contornos, sabe que Dios está cerca.»

Este 300 millones, uno de los pocos programas que goza de casi absoluta autonomía en TVE, no cogió de sorpresa a TVE porque José Joaquín Marroquí Oliva, gerente del mismo, se había desplazado a Buenos Aires -según confirmaron en su secretaría- para supervisar el programa.