"Constitución o dictadura", base de la campaña por el voto afirmativo

Los últimos acontecimientos de carácter militar y las actividades de la extrema derecha han relegado prácticamente al silencio la campaña de propaganda para el referéndum constitucional, cuando faltan trece días para que se produzca la votación. Y, sin embargo, el carácter de la campaña ha cambiado tras los conflictivos días vividos: después del simbólico ¡firmes! que conmovió numerosas conciencias, los principales partidos han reaccionado con el cierre de filas en tomo a la Constitución.De la defensa del sí, más o menos rutinaria, y que en el fondo miraba a una movilización pre electoral más que a los contenidos constitucionales propiamente dichos, se ha pasado a presentar al electorado la disyuntiva «O Constitución o dictadura». Para instrumentar dicha política va a trabajar, cada uno por su lado, prácticamente todo el Gobierno, la totalidad de la ejecutiva del PSOE, los principales dirigentes del PCE, y los secretarios generales del PTE y la ORT, entre otros.

Para la izquierda, esto supone el primer intento de movilización después de muchos meses de desmovilización casi total, es decir, de recuperar el contacto cúspide-bases y hacer comprender los peligros que amenazan a la democracia, incluso a los mayores críticos de la política seguida hasta la fecha.

En su afán de «peinar» el territorio nacional en busca del voto afirmativo, el Partido Comunista va a intensificar duramente su campaña, y durante este fin de semana, su secretario general, Santiago Carrillo, hablará en Vitoria y Pamplona. El Partido Socialista piensa hacer lo propio; gran parte de la ejecutiva estará en el País Vasco, el señor Gómez Llorente marchará a Asturias, y el secretario general, Felipe González, viajará a Andalucía. Este último dedicará al País Vasco el fin de semana siguiente, con mítines en Vitoria, Bilbao y San Sebastián. Por su parte, diez ministros del Gobierno pasarán este fin de semana fuera de Madrid, también con motivo de los actos pro Constitución.

Prohibidas las manifestaciones

Toda la campaña habrá de hacerse en locales cerrados y con la debida autorización de la Junta Electoral correspondiente, recuerda el Ministerio del Interior. Desde ahora hasta el próximo 10 de diciembre no podrá celebrarse acto alguno en lugares abiertos, bajo la forma de marchas, manifestaciones o cualquier otra modalidad. Esto se hace para conseguir «el clima apropiado de sosiego y normalidad ciudadana que precisa la trascendentalidad de tal hecho, al tiempo que se evita la manipulación de que están siendo objeto los actos a que se refiere la ley reguladora del derecho de reunión en lugares abiertos», según la circular enviada por el director general de Política Interior a los gobernadores de todas las provincias.La manipulación a que se hace referencia en la circular puede estar relacionada con la actividad de la extrema derecha, que desde el sábado hasta el martes pasado ha hecho acto de presencia masiva y ruidosa en las calles, oficialmente para recordar al anterior jefe del Estado y al fundador de la Falange, aunque en la práctica haya logrado reconducirlo hacia una bien aprovechada campaña contra la Constitución y el sistema democrático. Esto es casi más importante que los ataques contra el Gobierno, habituales en toda comparecencia pública de dicho sector político desde principios de la década actual.

Por último, las encuestas manejadas por el Gobierno indican que acudirá a votar en el referéndum el 82% del censo total, según datos de Europa Press. Si ello fuera cierto supondría un porcentaje de participación aún más alto que el de las elecciones generales de junio de 1977. En el País Vasco, la citada encuesta asegura que tiene intención de votar el 60% del censo, siempre según datos del Gobierno.

Por otra parte, ayer salieron del aeropuerto de Barajas dos grupos de parlamentarios en dirección a Caracas-Bogotá y Santo Domingo-Nueva York, con el fin de celebrar mesas redondas de carácter informativo sobre la Constitución ante grupos de emigrantes españoles en estas ciudades. Acudió a despedirles el director general del Instituto Español de Emigración y senador por Huesca, José Antonio Escudero. Estas mesas redondas se han celebrado ya en las principales ciudades europeas. Forman parte de la delegación los portavoces de UCD en el Congreso y en el Senado, José Pedro Pérez Llorca y Antonio Jiménez Blanco y el portavoz del PSOE en el Senado, Francisco Ramos.