Prohibida la venta ambulante en el distrito de Retiro

La prohibición expresa por parte del señor Horcajo, concejal del distrito de Retiro, de no permitir la venta ambulante de tebeos, baratijas y otros géneros menores en su distrito ha puesto en difícil situación económica a varias familias que, según sus explicaciones, sobreviven gracias a estas actividades. Aunque legalmente la venta ambulante está prohibida, el razonamiento de las familias afectadas es que muchos de ellos están sin trabajo desde hace años, otros son inválidos parciales o ancianos, y que «aplicar la ley a rajatabla, sin facilitarles otros medios de subsistencia, es un procedimiento poco humano, aunque sea legal».Según la explicación de dos de los afectados, vendedores de tebeos a cinco duros los tres ejemplares en el Metro de Atocha, desde el lunes pasado dos parejas de la Policía Municipal montan guardia para impedir que instalen su género. Ayer acudieron a la junta municipal del distrito a solicitar del señor Horcajo que levantara la orden, ya que es su único medio de subsistencia. Parece que el señor Horcajo les remitió al Gobierno Civil, de allí a otras dependencias administrativas y de allí, nuevamente, al Ayuntamiento.

Por segunda vez en el Ayuntamiento, y ante la insistencia en sus súplicas de los vendedores, el concejal reaccionó con cierta dureza afirmando que en su distrito no consentiría la venta de este tipo, y que si en otros puntos de Madrid se consiente, que acudieran a esos lugares.

Los más directamente afectados por la medida del concejal son Ricardo Beltrán, casado y con una hija; José Luis Esteban, inválido de la mano derecha, casado y con seis hijos; una señora viuda, con ocho hijos y otra gente de parecidas características. Ellos mismos reconocen que el negocio lo practican también personas que tal vez podrían desempeñar otros trabajos, pero la medida los engloba a todos. Piden que el Ayuntamiento estudie caso por caso, y permita la actividad de aquellos que realmente lo necesiten para vivir.