Garaicoechea: "No hemos cambiado el sentido de la manifestación"

«Es absolutamente incierto que hayamos cambiado el sentido de la convocatoria del día 28. Parece que existe interés en algunos sectores Por evitar que nos desmarquemos del espectro de la radicalización y de la violencia.» Con estas palabras ha desmentido el presidente del PNV, Carlos Garaicoechea, las acusaciones que se han dirigido en los últimos días contra su partido, en las que se subrayaba que el PNV había suavizado el sentido de la convocatoria como consecuencia de la reacción desfavorable que provocó en su base.«Se trata -dijo Carlos Garaicoechea- de una manifestación contra todo tipo de violencia, de hacer un llamamiento a la paz, más que una declaración de guerra, a todos aquellos que la practican, incluidos los grupos de extrema derecha y de extrema izquierda.»

Garaicoechea insistió en el lema de la convocatoria: «Por un Euskadi libre y en paz», para advertir «no queremos que nadie arrime el sentido de la manifestación a su propio molino, ni que el Poder central aproveche la manifestación para acentuar la represión. Hay sectores que no pueden pasar por ese lema».

El presidente del PNV calificó de comprensibles los ataques dirigidos a este partido desde la izquierda abertzale, aunque señaló que, en privado, uno de los que la integran le había manifestado su comprensión por adoptar esta iniciativa.

Refiriéndose a la reacción de las bases nacionalistas, Garaicoechea dijo que se había exagerado. «Es cierto -añadió- que se ha producido cierta conmoción y un cierto trauma, puesto que está muy dentro de todos el sentido de la resistencia fascista, pero es absolutamente necesario clarificar la posición rotunda del PNV en contra de la violencia.»

Por su parte, el comité ejecutivo de ANV-ESB, formación política integrada en la coalición abertzale Herri Batasuna, ha acordado pedir públicamente al PNV que desconvoque la manifestación antiterrorista del día 28 en aras de una unidad vasca que, a su juicio, podría cristalizar en un frente de rechazo a la Constitución.

Es en este contexto en el que ANV-ESB entiende que debe tratarse el tema de la lucha armada y para ello se brinda a participar en una reunión de todos los partidos nacionalistas, En el caso de que el PNV decida mantener su convocatoria, añade la nota que deberá asumir consecuencias totalmente imprevisibles.

ANV-ESB puntualiza que como partido político que es nada tiene que ver con la lucha armada, pero que ésta no se remonta al nacimiento de ETA, sino al aplastamiento del pueblo vasco en 1839, con la consiguiente pérdida de sus libertades forales. Por eso considera que no cabe una interpretación simplista del tema dominada por criterios electoralistas, mucho menos cuando se da la circunstancia de que el gobernador civil de Pamplona prohibe una manifestación para pedir el esclarecimiento de los sucesos ocurridos en los «sanfermines» y el castigo de los culpables.